Volviendo a lo que decía más arriba: El tema de la supuesta infidelidad del protagonista (cuando decide investigar con la periodista todo el embrollo de los ascensores y unos amigos de la familia los pillan juntos, pero no revueltos) queda sin resolver y la mujer de nuestro currito con el enfado cuando realmente no había pasado nada. La peli acaba así, sin más, sin el héroe volviendo a casa para poner en orden su vida familiar. Pues vale, pero no entiendo para qué sacan un tema que ni siquiera resuelven.

Una cosa que resulta cuanto menos, curiosa, es el hecho de que un ascensor averiado, que provoca varios accidentes siga accesible a más gente para que la palme y que la gente entre en él sin necesidad de optar por las escaleras o un mísero cartel que diga "Peligro, ascensor dañino". Supongo que entonces los ascensores eran un mundillo más desconocido. Igualmente, resulta poco creíble el asunto.