FA
colaborador
Media votos
7,5
Votos
1.242
Críticas
609
Listas
1
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Teresa:
9
5,9
35.302
Thriller
De repente, sin saber cuál es su origen, aunque todo hace sospechar que comienza con el viaje de una norteamericana a un casino de Hong Kong, un virus mortal comienza a propagarse por todo el mundo. En pocos días, la enfermedad empieza a diezmar a la población. El contagio se produce por mero contacto entre los seres humanos. Un thriller realista y sin efectos especiales sobre los efectos de una epidemia. (FILMAFFINITY)
20 de marzo de 2020
57 de 61 usuarios han encontrado esta crítica útil
Era el año 2011 y un director ya conocido, Steven Soderberg, estrenaba esta cinta que a muchos pasó por alto y que otros tildaron de telefilm o de poco realista y muy interesada. Estamos en marzo de 2020 y parece que se está cumpliendo lo que profetizaba ésta y otras tantas del estilo, que parecía que nos llamaban al alarmismo y a la típica frase de «a mí no me puede pasar eso». Llevamos meses mirando la televisión desde nuestras casas, en lo que pensábamos era un país seguro –en todos los aspectos, de hecho-, incluso cuando lo veíamos más cerca, como en Italia o Francia, nuestro cerebro nos repetía algo así como «aquí eso no» y al final ha sido un «aquí también» muy rotundo. Sodeberg nos advertía que todos somos humanos, que todos –da igual de dónde seas o la raza- nos podíamos ver afectados por cualquier virus. La película pasó de puntillas, aunque con buenas críticas en su mayoría y es ahora, estas últimas semanas, cuando se está mirando con otros ojos. Sodeberg es de esos directores que tuvo la suerte de estar en el sitio y hora adecuado. Su padre era Decano de la Universidad Estatal de Luisiana y allí descubrió su pasión por el cine; tanto es así, que después de graduarse en la secundaria probó suerte en Hollywood. Realizó trabajos de ayudante y mientras grababa cortos en 16 mm. Pero fue al dirigir el vídeo 9012 live de la banda Yes en 1985 cuando empezó su carrera. Le recordamos por pelis como Sexo, Mentiras y Cintas de Vídeo (que reponen bastante en televisión), Erin Brockovich, Traffic (que le valió el Oscar a mejor director en el año 2000), Ocean´s Eleven, Bubble o Efectos Secundarios. Si echamos la vista atrás, nos damos cuenta de que es un director con una visión muy especial de la vida (sólo hay que ver Traffic o Efectos Secundarios, dos temas de actualidad tomados de una forma poco habitual –como psicóloga Efectos Secundarios me pareció muy realista y brillante, porque pocas personas piensan en esos detalles), y eso es lo que pasa con Contagio, que parecía muy lejano, casi imposible, pero los imposibles no existen. Destacar al siempre increíble Matt Damon, en el papel de padre y marido, Mitch; las bellas Gwyneth Paltrow (Shakspeare in Love, Iron Man, Amor Ciego, The Politician) y Marion Cotillar (Largo Domingo de Noviazgo, Enemigos Públicos, Origen) que aunque no aparecen demasiado, siempre son bienvenidas; Kate Winslet (Titanic, Sentido y Sensibilidad, Revolutionary Road, Divergente, Steve Jobs) está perfecta –como siempre-; Laurence Fishburne (CSI, Matrix, El Hombre de Acero), que a pesar del papel que realiza aquí, es bien reconocido por todos; Brya Cranston (Malcom in the Midle, Breaking Bad) en un papel un tanto desaprovechado; Jennifer Ehle (El Discurso del Rey, Robocop, Cincuenta Sombras de Grey) y no me olvido de mi siempre atractivo Jude Law (Inteligencia Artificial, Efectos Secundarios, Sherlock Holmes, El Gran Hotel Budapest, La Huella, El Talento de Mr. Ripley) que aquí tiene el rol más toca huevos –típico periodista que averigua toda la mierda antes que nadie-.
El largometraje tiene buena fotografía, nada que ver con un telefilm; las actuaciones son excepcionales, aunque no se desarrollan todos los personajes y algunos quedan un poco desdibujados, como el de Cotillar. A pesar de este detalle, no se hace lenta ni aburrida y al contrario, mantiene bien la tensión, sobre todo ahora, con el tema tan cercano que nos toca vivir.
El largometraje tiene buena fotografía, nada que ver con un telefilm; las actuaciones son excepcionales, aunque no se desarrollan todos los personajes y algunos quedan un poco desdibujados, como el de Cotillar. A pesar de este detalle, no se hace lenta ni aburrida y al contrario, mantiene bien la tensión, sobre todo ahora, con el tema tan cercano que nos toca vivir.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Beth (Paltrow) vuelve de un viaje de negocios en Hong Kong; parece cansada y un poco enferma, pero es algo normal después de trabajar y de un largo viaje en avión. Saluda a Mitch y a su hijo y pasan las horas. Un par de días después Beth se desmaya en su cocina, le da un ataque epiléptico y se queda en estado semi catatónico. Mientras Mitch intenta aceptar que finalmente Beth ha muerto, le llama la cuidadora para decirle que su hijo pequeño parece inconsciente o muerto. Efectivamente, el niño también ha muerto. Paralelamente, un periodista freelance, Alan (Law) lleva días detrás de un vídeo, proveniente de Hong Kong, donde un chico se desploma en el metro, siendo grabado por cientos de móviles. Cuando le realizan la autopsia a Beth, descubren un virus nuevo, por lo que el CDC se pone en marcha para estudiar el caso, enviando a hablar con Mitch (que está ya en cuarentena y sin síntomas) a la doctora Erin (Winslet) que intentará trazar el camino hacia atrás para llegar al paciente cero, al momento exacto donde ocurrió el primer contagio conocido; en el curso de las preguntas Mitch se entera de que Beth le fue infiel y ahora el amante y ella están muerto, además del hijo de ella. Ellis (Fishburne), representante o jefe del Departamento de Seguridad Nacional envía a Ellis a Hong Kong para averiguar más, pero ésta terminara infectada por el virus y muriendo (con muchas más gente). Mientras, las farmacéuticas ya están fabricando una vacuna. La OMS envía a Leonora (Cotillard) para investigar; también terminará en Asia, pero a ella la van a secuestrar para asegurar la vacuna a un poblado pobre que sabe que la ayuda no llegará a tiempo. En el CCPEEU, la doctora Ally (Ehle) descubre que el virus es una mezcla al 50 % de material genético de cerdo y murciélago; su padre está enfermo; no hay tiempo para pruebas eternas para conseguir la vacuna, y cuando cree que tiene una lo suficiente estable la prueba con ella misma. Mientras, Mitch huye con su otra hija porque están poniendo la ciudad en cuarentena y se ha convertido en una anarquía donde el miedo campa a sus anchas. Mientras tanto, Alan, intenta hacer creer a través de su blog que las farmacias se van a hacer de oro y que hay medicamentos, como la Forsythia que puede curar el nuevo virus.
Con una trama más complicada de lo que parece en un principio se consigue tocar muchos temas importantes que ahora nos preguntamos todos o casi todos. ¿Hay vacuna?, ¿quién es el paciente cero realmente?, ¿hay alguien importante detrás de todo?, ¿Quiénes vamos a pagar los errores que se van cometiendo a cada minuto?
Al final nos muestran una panorámica desde arriba, en Hong Kong donde vemos cómo se derriba un bananero cerca de un local donde se reúne Beth a hacer negocios. Los murciélagos se asustan y sueltan restos de comida en las porquerizas y éstas son comidas por los cerditos; minutos después uno de los cerditos es llevado para cocinar al restaurante; mientras lo está cocinando, el chef, es llamado para saludar a Beth, se limpia las manos en el delantal y le da la mano, comenzando un contagio brutal (sobre todo al ser un virus sin mutar a algo más benigno para el ser humano).
Impresionante guion, que visto hoy nos hace estremecer por lo que vivimos ahora.
Con una trama más complicada de lo que parece en un principio se consigue tocar muchos temas importantes que ahora nos preguntamos todos o casi todos. ¿Hay vacuna?, ¿quién es el paciente cero realmente?, ¿hay alguien importante detrás de todo?, ¿Quiénes vamos a pagar los errores que se van cometiendo a cada minuto?
Al final nos muestran una panorámica desde arriba, en Hong Kong donde vemos cómo se derriba un bananero cerca de un local donde se reúne Beth a hacer negocios. Los murciélagos se asustan y sueltan restos de comida en las porquerizas y éstas son comidas por los cerditos; minutos después uno de los cerditos es llevado para cocinar al restaurante; mientras lo está cocinando, el chef, es llamado para saludar a Beth, se limpia las manos en el delantal y le da la mano, comenzando un contagio brutal (sobre todo al ser un virus sin mutar a algo más benigno para el ser humano).
Impresionante guion, que visto hoy nos hace estremecer por lo que vivimos ahora.