Insufrible, pomposa, aburrida y absurda comedia de Stanley Donen ambientada en los años 30, con un argumento, una historia y unas interpretaciones que no despiertan el más mínimo interés.. ni siquiera el mismísimo Hackman se salva de realizar una mala interpretación.

Aunque mucho peor lo hace Burt Reynolds, quien "interpreta" un personaje muy similar al que dió vida años más tarde en otra película ambientada en los años 30: "Ciudad muy caliente". Ambos personajes son un par de auténticos gilipollas en la Ley Seca.

La interpretación de Liza Minelli también es inexistente....

En definitiva, un despropósito de película.

Lo gracioso del asunto es que Steven Spielberg estaba interesado en dirigir esta bazofia en lugar de dirigir "Tiburón". Bendigo el día en que cambió de opinión y se decantó por realizar la mítica y ya clásica "JAWS"... y estoy seguro de que el propio Spielberg también.