Yo soy Bea (Serie de TV)

Al principio tenía su gracia y reconozco que hasta me enganché un poquillo con la fea, pero por el amor de Dios, la serie llegó a un punto en el que se hizo pesada, repetitiva, absurda y redundante. No hace mucho, llevaba varias semanas sin verla y vi un capítulo de casualidad y todavía seguía con la misma historia!! No había pasado nada relevante!! Como tuvo mucho éxito, los productores quisieron alargar demasiado el chicle y al final se han cargado la serie. Pudo ser algo gracioso, pero la verdad es que la serie ahora mismo es un bodrio. Y nada más, la serie no merece más comentario al respecto.

Esta serie desde que empieza no hace otra cosa que caer en picado. Y es que los refritos creo que nunca son buenos.

Para empezar la inmensa mayoría de los personajes son malísimos, algunos incluso patéticos. Resalta lo absurdo y la mayor de las ignorancias...

Y si no fuera suficiente lo anterior, la serie se alarga hasta la saciedad, inventando historias y situaciones estúpidas y sin sentido que provoca un sopor supremo.

Y por favor... la transformación ya ha sido para pegarse un tiro... Tanto bombo le dieron y luego se quedó en poca cosa...

Bueno, lo dicho... que no vale la pena seguir esta serie, y menos ahora que van a reinventarla... pero ¿de qué manera? De la peor, seguro

Sí, es verídico y se me cayó el vaso en cuanto lo vi.
Resumo: Mi madre estaba viendo yo soy bea y me pidió un vasito de agua; entro con el vaso y me encuentro con el chechu pillando con una y le dice: "aparentas menos de 30" y una risilla entrecontrada. Acojonante. Me quedé de nieve, casi sin respiración y pensé: Ya no es un niño, ahora es un hombre y está ante el papel de su vida. Lo que nos faltaba a la humanidad.
En la serie de la Obregón ya apuntaba maneras pero se ha puesto con una cara de hogaza que no puede con ella.
Aarón de aquí a los goyas falta poco, lo sabes y sé que puedes, tienes condiciones, camaleón que eres un camaleón. Cómo te mimetizas por Dios.

Este es un claro ejemplo en el que se deja ver como la avaricia rompe el saco.

Comenzó como una serie de gran auge y cuando debía de culminar su final con gran éxito, se les subieron los humos y, como no, decidieron alargarla para seguir siendo casi, casi líderes de audiencia.
Es uno de esos casos en los que se podría aplicar ese refrán que dice: lo poco agrada y lo mucho cansa.
El ansia de continuar en televisión creció y allí se quedaron. El problema es que también se quedaron sin argumentos, por lo que eligieron lo más fácil: repetir una y otra vez las historias.

Tras ver los primeros capítulos tengo que decir que no aguanté ni medio año, ya que enseguida me di cuenta de que iba para largo, y no me confundí en absoluto porque cada vez que tengo tiempo pongo Yo soy Bea (entre otras cosas porque no hay nada interesante a esas horas) y me doy cuenta que, aunque te pierdas dos semanas de capítulos, se puede coger el hilo perfectamente.

Lo único que puedo decir son dos palabras: simplemente patético, y pediría por favor que no se emitan más crueldades visuales como ésta.

Mala de cojones... Una inmundicia absoluta... Ideal para cuando te estás muriendo y no hay capellán disponible... Un bodrio listo para ser digerido sin reparar en consecuencias... La arcada definitiva... Una forma de suicidio lenta y dolorosa...El equivalente a tirarse por un barranco en pelota picada... La degradación en su grado máximo... Una bazofia de la peor calaña... Comida basura mal preparada y encima, caducada... Si las ratas y moscas del basurero tuvieran fe en DIOS, esta serie sería su infierno... Una vomitona que nunca termina... Cómo terminar con tu inteligencia sin abrirte el cerebro y echárselo a los monos del zoo... Las mierdas deberían llamarse "Bea" y no "mierdas"... Y así podría continuar eternamente pero tengo cosas mejores que hacer que dedicarle tantas palabras a este pedazo de mierda...