Territorio grizzly

Por fin ha llegado a nuestro país esta cinta que, por lo visto, ha tenido una producción como poco accidentada. Supe por primera vez de ella hace ya unos cuantos meses cuando estaba revisando la trayectoria de James Marsden en esta página (ya lo sé, cada cual tiene sus aficiones y sus cosas raras) y me puse a buscarla por Internet para ver si la encontraba. Fue imposible y me tuve que agenciar de forma no muy lícita una copia en V.O.S. No me disgustó la verdad. A ver, no es que sea la octava maravilla del mundo ni nada que se le acerque, pero me pareció que, a pesar de sus cosas*, no estaba nada mal. Como decía Ford Fairlane de un batido de sambuca, "no está mal, no está mal... se puede beberciar".
El argumento está mil veces visto. Un par de hermanos que se han distanciado por el tiempo y por sucesos traumáticos vuelven a encontrarse por la llegada a casa del más díscolo y juntos tendrán que enfrentarse (con sus respectivas parejas) a un oso que se ha vuelto loco y que está sembrando el pánico en el lugar. Así pues tenemos los conflictos familiares por un lado, con sus tiranteces y disputas, y las fuerzas de la naturaleza incontrolables a las que debe enfrentarse el ser humano y que, con anterioridad, ha sido propiciadas por el mismo ser humano, casi siempre movido por la codicia.
No es un peliculón, pero no está nada mal. Tenemos acción, suspense, conflictos fraternales, una lectura ecologista contra el ser humano que cree que puede dominar la naturaleza. Y todo ello con un reparto que, aunque ha conocido momentos mejores, es solvente: James Marsden, Thomas Jane, Billy Bob Thronton, Scott Glenn y Piper Pirabo.

Si pretenden asustarnos con un oso devora-hombres (y mujeres) lo tienen claro, por muy enorme que sea este ejemplar, que lo es. Hay una imagen en el que se le ve que es más alto a cuatro patas que Piper Perabo, que no es que sea muy bajita, aunque no sé si han retocado la toma porque me parece demasiado llegar al 1,70 de altura de cruz. Sea como fuere, tenemos a un oso Kodiac, que no Grizzly, que es interpretado por Bart the Bear 2, no confundir con el que salía en "El oso" (1988), con el que no le une ningún parentesco, un osito actor de una apreciable carrera en el cine y la televisión.

Pero bueno, al animal no se le ve nada agresivo, ni da miedo, pero si se pone chulo te hace papilla en un instante, por muy mono que sea. Así que nuestros amigos tendrán que lidiar en plena montaña contra uno de estas fieras de la naturaleza, convertido en un asesino. La película tiene buen ritmo, personajes atrayentes y buenos efectos, los ataques son muy reales, aunque a veces es aparatosa, el final, y algunas decisiones, ¿cinco cartuchos solamente?, son un error. Destaca un reparto plagado de caras famosas de entre las cuales me quedo con la belleza de P. Perabo y Kelly Curran.

Esta película es un telefilm, carne de sobremesa, de esos que sirven para echarte una siestecilla sin temor a perderte algo interesante, básicamente porque no hay nada interesante que ver.
Dentro de las grandes amenazas que retratan este tipo de pelis, esta vez acudimos a la sección naturaleza, apartado animales salvajes, más concretamente un oso grizzly muy cabreado (ignoramos el porqué, aunque tampoco es que tenga mucha importancia).
La historia sigue el esquema clásico: muertes misteriosas, investigación, buenos y malos (nada más aparecer en pantalla ya sabes quién va a morir, y de qué manera), persecución y final.
Lo que es extraño es encontrarse aquí a varios actores que no suelen participar en este tipo de producciones: Thomas Jane, Billy Bob Thornton o Scott Glenn. De hecho, pese a que el título y el cartel son bastante clarificadores de lo que te vas a encontrar, estos nombres sirven de reclamo para echar un ojo a la peli con ciertas esperanzas de encontrar algo distinto. Mi gozo en un pozo.
Por cierto, aparece Piper Perabo, la actriz de El Club Coyote.

Soy cinéfilo, un apasionado del Fantástico y escritor de novelas, las cuales muestran una cierta influencia cinematográfica. Filmaffinitty es un punto de referencia para todo aficionado al cine, que desea saber si una película merece o no la pena, a pesar de que opiniones las hay como estrellas en el firmamento. De buena a mala, o simplemente pasable, la película que nos ocupa merece el calificativo de: INTERESANTE.
A pesar de lo alto que apuntan últimamente la calificaciones en esta magna página, esta película me parece bien hecha y da a al espectador todo lo que parece prometer. Está bien fotografiada, mantiene un ritmo constante, los efectos son buenos y el reparto cumple. Y el oso estrella está de miedo. Las he visto peores y con mejor puntuación; eso sí que un chiste. Pero esta cinta te mantiene durante su poco menos de hora y media, y al final, la sensación que tienes es agradable. Como debe ser. Sin grandes pretensiones, la recomiendo a todo aquel que le guste el género.

No me gustó mucho esta película, es que la trama se me hizo tan mala y las actuaciones o mejor dicho, los personajes no me atrajeron nada. Lo que si me gustó bastante son las espectaculares localidades, esos bosques son preciosos aunque da mucho dolor las partes donde se ven la tala de arboles. Y tanto que leí sobre el Billy Bob y no me pareció la gran cosa su personaje.