Joe's Violin (C)

Terminando de ver “Joe's Violin” (2016) de Kahane Corn Cooperman & Raphaela Neihausen con Joseph Feingold, Kokoe Tanaka-Suwan y Brianna Perez, entre otros. Cortometraje dramático, nominado al Premio Oscar en la categoría de mejor cortometraje documental, y con sus 24 minutos de duración, es casi un “biopic” muy bien montado sobre Joseph Feingold, hoy de 93 años, y sobreviviente polaco del Holocausto, que dona su violín a una unidad de instrumentos locales del Bronx, cambiando la vida de Brianna Perez, una niña de 12 años del distrito más pobre de EEUU. Y es que desde el 2014, la estación de música clásica, WQXR, ha estado recolectando instrumentos que la gente ya no utiliza, arreglándolos y distribuyéndolos a los estudiantes de la escuela de New York. Así, miles de instrumentos han sido puestos en manos de niños necesitados. Por tanto, durante 70 años, ese violín fue una de las posesiones más preciadas de Joe Feingold, pues lo compró en el mercado negro después de la guerra, mientras vivía en un campamento de desplazados, y fue pagado con un cartón de cigarrillos. El documental muestra cómo el poder de la música puede traer luz en los momentos más oscuros; y cómo un pequeño acto, puede tener un gran impacto. Con donar su violín, Joe está permitiendo que una nueva generación se conecte a la historia del Holocausto, mantenga viva la música de su instrumento, ofrezca a otra persona el placer de tocarlo, y para otros, el placer de escucharlo. Como dato, la producción de este corto documental es especialmente importante, debido a que el financiamiento y los recursos para la educación artística en EEUU, están siendo extremadamente amenazados; de ahí que El Instituto de Aprendizaje Global para Niñas del Bronx, incorpora apasionadamente la educación musical en su currículo académico diario. En definitiva, “Joe's Violin” (2016) ilumina el innegable efecto positivo que la educación musical tiene en la vida de los jóvenes, y el poder evocador de la memoria en quienes tocan un instrumento. Hace hincapié en celebrar el poder intangible de la música para consolar al alma, evocar los recuerdos, y traer alegría a todos; siendo a la vez, una declaración sobre la diversidad, de todos los orígenes étnicos y religiosos. “Joe's Violin” (2016) está dedicado a la memoria de Regina Kaufmann Feingold, y la pieza central “Peer Gynt Suites: Solveig's Song” de Edvard Grieg, corona muy bien el hecho que la música es capaz de transformar vidas. “La gran lección de Joe, es básicamente la supervivencia y la esperanza, no importa lo que estés pasando, sin importar lo difíciles que sean los desafíos”, dijo Brianna Perez, que tras su graduación, otro estudiante será elegido para tocar el violín, asegurando a perpetuidad, la memoria de Joe en la escuela.
RECOMENDADA.
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/