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30 de noviembre de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
A quemarropa (y sin aliento). El amor en los tiempos del covid, a la rusa, de forma seca, estoica, malhumorada, sin estragos ni alardes.
Parecía escrita o pensada por un ordenador, previsible y mediocre, pintona metálica, correcta (mente mala), y al final no, incluso peor, las revueltas últimas la estropearon del todo, pasó de consabida a imposible y además, a pesar de ser tan corta, se hace demasiado larga o pesada.
Héroe romántico, "el extranjero" ("mata" sin saber ni cómo ni por qué), que huye de un crimen ¿que no había cometido? (hagan apuestas), se enamora de casquivana caprichosa rica, hombre pobre, mujer con posibles, esa ecuación chula a prueba de bombas de toda la vida, y juntos se enfrentan a la mafia rusa (pobres hombres, promesas del este), valga la vulgar redundancia, y por el camino no me entretengo, solo al principio un poco, algo, escaso.
Desvaída y deshumanizada, pobretona en todos los aspectos, también morales, deambula con parsimonia, digna, pero aburrida, fallida, más cuando intenta ser pretenciosa (esa coda, supuestamente, ambigua con la que juegan, como si quisieran dejar la intelectualizada indeterminada duda como corona en la pura nada, qué -nos- importa, a buenas horas).
Parecía escrita o pensada por un ordenador, previsible y mediocre, pintona metálica, correcta (mente mala), y al final no, incluso peor, las revueltas últimas la estropearon del todo, pasó de consabida a imposible y además, a pesar de ser tan corta, se hace demasiado larga o pesada.
Héroe romántico, "el extranjero" ("mata" sin saber ni cómo ni por qué), que huye de un crimen ¿que no había cometido? (hagan apuestas), se enamora de casquivana caprichosa rica, hombre pobre, mujer con posibles, esa ecuación chula a prueba de bombas de toda la vida, y juntos se enfrentan a la mafia rusa (pobres hombres, promesas del este), valga la vulgar redundancia, y por el camino no me entretengo, solo al principio un poco, algo, escaso.
Desvaída y deshumanizada, pobretona en todos los aspectos, también morales, deambula con parsimonia, digna, pero aburrida, fallida, más cuando intenta ser pretenciosa (esa coda, supuestamente, ambigua con la que juegan, como si quisieran dejar la intelectualizada indeterminada duda como corona en la pura nada, qué -nos- importa, a buenas horas).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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