Eureka

Soberana decepción. Me enfrentaba a ella a ciegas, no sabía nada a priori más allá de lo referente al argumento que leí en la contra de la carátula (que no pintaba mal) y del reparto, de notable alto: Gene Hackman, Rutger Hauer, Theresa Russell, Mickey Rourke, Joe Pesci...

Y lo que me encontré fue un film absolutamente caótico, sin rumbo definido, que desaprovecha las posibilidades del elenco, que roza el ridículo en varios ocasiones. Un despropósito filmado a trompicones, que no sabe bien qué quiere contar y encima lo cuenta mal.

A evitar...

Espantosa, horrorosa, absurda, llena de basura... yo qué sé cuántos calificativos más podría ponerle, y ninguno bueno. No merece la pena ni por ver a algunas de las estrellas en sus comienzos (por ejemplo Hauer, que interpreta como enajenado por anfetamina).

Lo dicho en las demás críticas yo lo reitero: no merece ni un minuto de vuestro tiempo.

Bonito chasco el que me he llevado.

Andaba últimamente como un poseso detrás de esta película, para verme a mí más que nada. Motta estaba en mi misma situación, creo recordar. Pero unos buenos subtítulos seguían en el limbo.

Pues bien, el canal MGM la emitía esta mañana a las 8.15, y ahí estaba yo, armado con un café y delante del espejo.

Una de las peores películas que he firmado, sin duda. Algo doloroso, teniendo en cuenta que hablamos de 1982, año en el que intervine en la superlativa Diner, y época en la que comenzaba a abrasar pantallas sin apenas esfuerzo.

Pero vamos, yo no soy el problema. El problema es un guión que oscila entre lo indefinido, lo surrealista y, en última instancia, lo absurdo.

Tiene cierta personalidad, e incluso un ligero encanto. Pero no despega, no.

El desaprovechamiento del soberbio reparto (Gene Hackman, Joe Pesci, Theresa Russell, Rutger Hauer, Joe Spinelli, yo...), por cierto, no es una lástima.

Es un delito.

Basura, que no te engañe su conocido reparto, la película es mala con ganas no me explico cómo el productor de El último emperador financió semejante bodrio raro y malo donde los haya.

Después de ver Eureka, la sensación que queda es la de un film que se queda a medio camino, que no aprovecha el tirón que tiene la historia y el excelente reparto de actores.
Tras un buen rato viendo la película te preguntas de que va todo esto ya que la historia es muy superficial, no ahonda en los personajes y pierde credibilidad a marchas forzadas. Sólo hay unos atisbos de interés hacia el final del film. Parece que Nicolas Roeg, quería saltarse los convencionalismos cinematográficos, para hacer una película más original en el planteamiento y las imágenes, pero todo esto no ayuda a la comprensión de la historia que la desaprovecha totalmente.
De todas maneras la película tiene algunos destellos, como las palabras que pronuncia el personaje de Jack McCann (Gene Hackman) justo antes de finalizar la película. Mencionar también la bonita banda sonora.