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Inside No. 9: The Referee's a W***er (TV)

Comedia Es la última jornada de la temporada de fútbol y todo depende del último partido; el choque decisivo entre United y Rovers. Todo está en las seguras manos de los cuatro árbitros del partido.
Críticas 1
Críticas ordenadas por utilidad
17 de febrero de 2020
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
32/09(16/02/20) Muy divertido primer capítulo de la quinta temporada de la serie de culto antológica de la BBC creada por Steve Pemberton y Reece Shearsmith, que tiene la particularidad que toda la acción acontece en un lugar con el número 9, en este caso en los vestuarios del árbitro en torno al meollo de un importante partido de fútbol. Martin (David Morrissey) es el líder de un grupo arbitral (en su último partido [United Vs Rovers] antes de jubilarse con un currículo inmaculado) con sus linieres, Phil (correcto Ralf Little) y Oggy (divertido Steve Pemberton), y cuarto árbitro, Brendan (buen Reece Shearsmith). Es un episodio que a los futboleros encantará por mostrase esa trastienda que nadie nunca ve, y que todos especulamos con lo que piensan esos seres tan vilipendiados por unos y por otros, como tiene sus filias y fobias, como pueden haber esas ‘políticas’ de compensación tras saberse errados en alguna ocasión, como influye el mundo de las apuestas. También puede gustar a los no degustadores de este deporte, pues maneja códigos universales, solo que en este caso todos sabemos que el futbol lo magnifica todo, para ello bien expuesto en la mítica frase de (icónico entrenador del Liverpool) Bill Shankley ‘Algunos creen que el fútbol es solo una cuestión de vida o muerte, pero es algo mucho más importante que eso’, sobreimpresionada antes del inicio. Maravilloso que en apenas media hora se pueden delinear tan bien los personajes, humanizándolos, haciéndolos tridimensionales, con sus defectos, ilusiones, secretos, obsesiones, a lo que se suman diálogos ingeniosos, situaciones jocosas, giros inesperados que te dejan ojiplático, ello en un ritmo trepidante, donde no paran de suceder cosas que hacen avanzar el relato, partido en tres bloques (62 minutos antes del inicio; el descanso tras la primera parte; y la finalización). Todo desarrollado con mordacidad, hablando del sentido del deber, de la homofobia, de la violencia en el deporte, y sobre todo de la complicada labor del árbitro (se puede extrapolar a cualquier ámbito de la vida).

Es una comedia negra muy al estilo de esta serie a reivindicar que extrañamente aún no ha llegado a España, jugando con los estereotipos, abriendo grietas en ellos, con running-gags estupendos (el cuarto árbitro y su manía de sacar siempre a colación san Siro como sinónimo de elegancia; o el de no saber que animal es la mascota del equipo local), con momentos estupendos caóticos como esa entrada en el vestuario en el descanso, o el estruendoso final. Todo llevado en un in crescendo incisivo, coronado por un epílogo sorpresivo que te deja pensativo sobre lo que hemos visto (spoiler).

Árbitro: "Podemos sincronizar relojes, por favor?"
El linier Oggy: "No tenemos que hacer eso, no es Misión Imposible"

David Morrissey norda su rol de Martin el árbitro, aporta carisma y elegancia, te crees su liderazgo, muestra una gran flema, sabiendo dejar entrever emociones.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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