Column (C)

Este film de corta duración (22 minutos) es uno de los más impactantes retratos de lo abyecto y despiadado del ser humano que he visto en la historia del cine.

Ambientado en el éxodo de los albaneses que huyen de Kosovo y del exterminio al que fueron sometidos por las milicias y tropas serbias, ante la pasividad europea (todo hay que decirlo), el relato se centra en la decisión de vida o muerte que tiene que tomar un hombre en una situación extrema y de las consecuencias de dicha decisión, en él y en otras personas cercanas.

Son 22 minutos de cine brillante y poderoso, impecable e implacable. Es, lo reconozco, un puñetazo en el estómago del espectador y desearía que todos los gerifaltes, políticos y militares que, habiendo podido evitar la guerra de los Balcanes se quedaron de "espectadores pasivos", también vieran este corto y lo sintieran en sus propias carnes.

A ver si así damos algún síntoma de que el ser humano, que se supone habita en todos y cada uno de los hombres, sigue vivo.