Como amante del cine, siempre me emociona la perspectiva de una nueva película, especialmente cuando viene con la promesa de una narrativa intrigante y reflexiva. Sinceramente, después de ver "Barbie", me siento como si hubiera sido víctima de un robo de tiempo. Esta película, que prometía ser una joya del cine contemporáneo, ha resultado ser un desastre de proporciones épicas.

La trama es tan inexistente que me pregunto si los guionistas simplemente olvidaron que una película necesita una. Los personajes son tan planos y carentes de vida que parecen más bien muñecos de plástico (válgase la ironía) que seres humanos reales. No hay profundidad, no hay emoción, no hay nada que te haga sentir algo por ellos. ¿Dónde está la historia?

Además, la película es un escaparate descarado de la marca Mattel. Es tan obvio que es casi insultante. Todo lo que veo es una estrategia de marketing disfrazada de película. Es una falta de respeto para el público que vino a ver una película, no un anuncio de juguetes.

Y luego está el "feminismo" de la película. Como alguien que cree firmemente en la igualdad de género, me horrorizó ver cómo la película retrataba a los hombres como monstruos y a las mujeres como ángeles. Este no es el feminismo. Este es un intento torpe y mal concebido de abordar un problema serio. No ayuda a la causa de la igualdad de género, solo la polariza aún más. Es un insulto a todas las personas que luchan por la igualdad de género.

Lo único rescatable de esta película son algunas de las canciones de la banda sonora. Al menos esas eran agradables. Y sí, el equipo de marketing hizo un trabajo increíble al generar expectación. Felicidades.

En resumen, "Barbie" es un desastre. Es una falta de respeto para el público y una mancha en el arte del cine. Es una película que debería ser olvidada y enterrada en el olvido. Y a aquellos que puedan sentirse ofendidos por mis palabras, les pido que recuerden, que esto es solo mi opinión. Después de todo, el cine es subjetivo.