Película apresurada e impostada.
Los interesantes diálogos de las primeras entregas aquí han desaparecido por completo.
La evolución de los personajes (si la hay) está mal desarrollada y es imposible empatizar con ninguno; Es más, el principal es odioso (madre mía, Rachel Zegler).
El trabajo de Tom Blyth es bueno, pero lastrado por todo el conjunto.
Una mala sacada del peor cuento de Disney (madre mía, Viola Davis). El resto son bobos o completamente olvidables.
Los guiños están muy forzados, sin magia.
Hay secuencias vergonzantes y ridículas.
Problemas infantiles de guion...
En fin, una lástima.

Vuelvo a decir lo mismo. Ningún amante de la ciencia-ficción debería perdérsela por nada del mundo, y menos por unas críticas que sospecho están hechas por gente del capitolio.
Ofrece más que la primera entrega en lo técnico, pero creo que no en lo emocional. En definitiva, sigue creciendo una gran historia, junto a sus personajes, y pese al gran número de detractores (con unos argumentos muy pobres), estoy seguro que con el paso del tiempo, aún nos parecerá mejor... Como toda buena obra.

Todavía recuerdo haber leído por aquí (de aficionados y profesionales), lo mal que lo hacía esta chica (Jennifer) en la primera entrega... En fin, una vez más, interpretación increíble y legendaria.
Gran final de historia con una parte técnica de nuevo al más alto nivel y, aunque sin llegar a los límites de la primera, muy satisfactoria emocionalmente. Bravo.

Parece ser que es obligado en este tipo de películas cubrir un mínimo de tiempo con explosiones y tiros para que parezca mejor... En fin.
En esta entrega encontramos la acción bélica justa y necesaria (filmada a la perfección, por cierto). No pide más la fase en la que nos encontramos. Por contra, (para los que dicen que no pasa casi nada), se teje a base de buenos diálogos, de tensión, de señales, metáforas... Una inspección de los distintos tipos de hombres y mujeres, y de sus almas.
También creo que es momento de aclarar otra cosa: Es para jóvenes con inquietudes y personalidad propia, es decir, para gente de todas las edades.

Ningún amante de la ciencia-ficción debería perdérsela por nada del mundo, y menos por unas críticas que sospecho están hechas por gente del capitolio. Es bella, muy bella, y eso hace que las cosas menos buenas que tiene, se difuminen sin más.