Al ver el póster y el tráiler de esta peli tenía unas ideas preconcebidas sobre su trama, y debo decir que al ver la película he quedado gratamente sorprendido.
Aclararé esas ideas preconcebidas que tenía y como me han sorprendido en la parte con spoilers.
La primera mitad de la película tiene un ritmo ágil, con elecciones musicales divertidas, y sin detenerse a explicaciones técnicas ni científicas sobre lo ocurrido que puedan entorpecer el ritmo.

A la economía narrativa y la agilidad de montaje se unen unos fantásticos efectos visuales, ciertamente al nivel de una superproducción A+. Los paisajes aéreos de la catástrofe están integrados perfectamente.
La fotografía en general saca partido a los escenarios desérticos e indómitos. Técnicamente la película es de 10.
Tom Hanks saca petróleo de cualquier pequeño momento o primer plano, solamente él contando una historia nos mantiene con la atención suficiente como para que nos interese y emocione lo que cuenta.
Entre otras perlas, la película tiene guiños obvios a Isaac Asimov y te hace pensar sobre ello en relación al robot y al personaje de Finch. Son pinceladas, no explicaciones de ciencia ficción dura, pero bastan para construir una dinámica que te mantiene pegado a la pantalla. No he mirado el reloj ni una sola vez, lo cuál es un triunfo de por si al ser una película de streaming, donde no tienes la ayuda de estar en una sala de cine para sumergirte aún más en la experiencia.
Merece mucho la pena. Juega con las expectativas en puntos clave de la trama, emociona, tiene momentos de espectáculo visual, y siempre es un placer ver a Tom Hanks haciendo un revival de Náufrago.