Acabo de verla en portugués, después de meses de espera y las expectativas estaban muy altas, pensé que difícilmente podría, no superar sino igualar a la primera parte, pero así lo hizo.
Ya no es una película de acción como la primera, pero mantiene la tensión de principio a fin y a pesar de sus casi dos horas de metraje, la calidad de la misma no decrece en ningún instante.
Si os gusto la primera, esta os encantara.

PD: En versión original gana mucho.

Como bien dice el titulo, al ver esta película se me ha venido a la cabeza los libros de Tom Clancy, padre de Jack Ryan, ya sabéis aquel que lucha capa y espada entre la lenta y torpe burocracia de la CIA, esto se hace mas evidente cuando se enseñan los glamurosos juguetes nuevos del ejercito americano, con el guiño al área 51, y con la parte en que el director de la CIA le da a entender a Ryan con tetas, que no son unos inútiles, porque la tienen a ella y vieron su potencial reclutandola desde el instituto.

La película no es mala, tiene buena ambientación y se nota el presupuesto... pero tiene ese tufillo pro-americano que parece pagado por el pentágono para lavar la cara después de ya 12 años de guerra fallida contra el "terror"( llámese también tíos barbudos sobre mulas).

Concuerdo de los colegas cine-filos en que la empece a ver sin expectativas, pensando que seria otra peliculilla mas de teen-terror, mi opinión no resultara objetiva porque no conocía a ninguno de los actores y ademas soy un entusiasta de los documentales sobre las misiones apolo, así que me lleve una grata sorpresa. Todo para que luego se convirtiera en ... esto.
Maldigo a los monos con maquinas de escribir y demás energúmenos de producción que apuñalan grandes ideas. Seguro que cuando se planteo el primero borrador era cojonudo... y luego empezaron a hacer cambios y mas cambios como sustituir al malo por un perro con mirada siniestra, mas escenas de tetas y demás brillantes ideas.

En fin, la culpa es de la MTV como siempre.

Guion entretenido, escenarios variados, secundarios que brillan mas de lo que se les exigía y un Jason Statham demasiado moralista que intenta ser mas humano de lo que es pero al menos.
Este director firma su primera película con un toque de calidad ochentera que es raro de encontrar en este tipo de películas donde priman los efectos especiales.
Es todo aquello que los Mercenarios debió ser, una peli sin Stallone.