Woody Allen trás su trilogía londinense ("Match Point", "Scoop" y "El sueño de Cassandra") y la española "Vicky Cristina Barcelona" regresa... pero regresa a lo grande, vuelve a sus neuras de siempre, a la muerte, al sexo, a Dios, a el fanatisimo religioso y a Nueva York.
El guión escrito como siempre por Woody Allen es genial cuenta la vida de un neurótico y desagradable hombrecillo interpretado por el humorista Larry David que acoje en su casa una niña paleta y más inocente que las amapolas que ha huido de casa, juntos viviran una disparatada historia.
La película regresa como no al humor de películas como "Annie Hall", "Manhattan",... y lo hace por lo alto.
El reparto está como siempre sensacional encabezado por el magnífico Larry David y Eva Rachel Wood y sin olvidar al resto que destacan notablemente.
La música fantastica como en el resto de sus películas.
Aúnque la película en algún momento puede tener algún pequeño resbalón es una de la mejores películas del genio neoyorquino.