Han pasado tres años de 'Ahora me ves' y esperaba con muchas ganas y expectación esta secuela. Una secuela que, en estos tres años, se ha dejado por el camino parte de la vitalidad y buen hacer del film de Louis Leterrier. ‘Ahora me ves 2’ ya no es un fenómeno, es una segunda parte que cumple en su labor de entretener y rematar parte de la historia original pero poco más.

Parte de culpa de que ‘Ahora me ves 2’ no luzca al nivel de su antecesora radica en la “funcionarial” dirección de Jon M. Chu y en la oscura fotografía Peter Deming. Chu no arriesga ni aporta nada y se limita a que el guión, los actores y el rodaje en Macao (buscando descaradamente los millones chinos) le salven la papeleta. Por otra parte, casi todo el film está rodado con una oscuridad increíble, ahora mismo recuerdo muy pocas escenas a la luz del día o en escenarios claros. Algo que también juega en contra del film.

Al respecto del libreto cabe decir que se alza por encima de la dirección. Ya de entrada, se nos presenta un buen y ágil prólogo en el que en unos escasos minutos se recuerda lo sucedido en el primer film y rápidamente se abre paso a esta nueva historia. Nueva historia que acierta al incidir en el pasado del personaje de Dylan Rhodes a la vez que rescata de la anterior película no sólo a “Los 4 Jinetes”, sino también a personajes importantes como Thaddeus Bradley… Eso sí, se echa en falta la carga crítica del anterior film.

En las actuaciones tenemos luces y sombras. Luces con Dave Franco, Jesse Eisenberg, Mark Ruffalo, Morgan y Daniel Radcliffe. Sombras con Woody Harrelson y Lizzy Caplan. Woody Harrelson en su representación como Chase (gemelo de Merritt McKinney) resulta absolutamente ridículo. Al respecto de Lizzy Caplan decir que hace uso de un desparpajo malentendido que, intencionado o no, termina por hacer que su personaje caiga mal por ir de sobrada o buscar gracietas fáciles. Al final, se termina echando muchísimo de menos el saber estar de Isla Fisher.

En definitiva: 'Ahora me ves 2' es una cinta que ha perdido claramente buena parte de la frescura de la original pero que sirve para completar algunos puntos de la historia de la primera parte. Además, aunque el producto ya no sea “superior” sirve para reencontrarse con unos amigos a los que particularmente echaba de menos… eso sí, al show esta vez se le ha visto el truco…

-Lo mejor: Continuar la historia profundizando todavía más en el pasado de Dylan Rhodes. Algunas espectaculares secuencias todavía rescatan la frescura de los trucos del primer film.

-Lo peor: Lizzy Caplan y Woody Harrelson. La floja y oscura dirección de Jon M. Chu. Nuevamente el hecho de meter personajes y escenarios chinos en busca de la taquilla del gigante asiático. El feo póster español con todos los personajes “apelotonados”.

-Más en: www.cineycine.com