''Stranger Things'' ha conseguido con esta temporada algo que parecía perdido, que es acercarse a un final definitivo para la serie.

Poco a poco, tanto los personajes como los actores van madurando, lo que le da un nuevo enfoque a la serie, donde el peligro está más presente que nunca en todos sus personajes.

Sobre el desarrollo propio de la temporada hay que remarcar que la trama funciona al contrario que en el resto de temporadas. Mientras que la serie nos tiene acostumbrados a comienzos más impactantes y más fuertes, esta cuarta temporada cuece a fuego muy lento todo lo que va a suceder, y nos presenta con mucha calma, tanto personajes que serán importantes para la trama, tanto otros que se quedarán en el olvido. Y si, uno de los grandes problemas de esta penúltima entrega de la serie es el tiempo que le ha llevado contar ciertas historias, y como han repartido el peso de la trama sobre sus personajes principales.

En general, si le quitamos esta duración excesiva, nos quedamos con una epicidad, una acción y un peligro incesante como nunca se han visto en la serie. Y cabe destacar que también se nos muestran posiblemente las mejores escenas de la serie.

Así que si, a tomárselo con calma y a disfrutar una vez más con ''Stranger Things''.