Haz click aquí para copiar la URL
España España · Almería
Voto de Gabriel Ufa:
7
Intriga. Drama El fiscal del distrito de Nueva York asigna a un abogado novato (Andy García) su primer caso: que se haga cargo de la acusación en el juicio más polémico y de mayor impacto mediático de la ciudad: un traficante de drogas es acusado de asesinato, pero el asunto tiene implicaciones de corrupción policial. Del caso en cuestión se ocuparon su padre, que resultó herido, y otro policía, que resultó muerto... (FILMAFFINITY)
10 de abril de 2010
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Siguiendo el camino explorado en anteriores films (“Serpico”, “Distrito 34:corrupción total"), Lumet retoma el tema de la corrupción policial, ahondando en los conflictos morales. Andy García es un joven ex-policía que ha llegado con gran esfuerzo a ayudante del fiscal del distrito de Manhattan, en la ciudad de Nueva York, escenario común en que el veterano director suele situar la acción. Pronto se le presenta una gran oportunidad: instruir la acusación contra un peligroso traficante que hirió gravemente a su padre (Ian Holm) y asesinó a otros dos policías.

Las interpretaciones rayan a un gran nivel, como suele suceder cuando hay un buen director de actores como es Sidney Lumet. Empezando por Jordan, “el traficante más odiado de Harlem”, un auténtico doberman. Ian Holm, el padre de un aplicado Andy Garcia, es un policía a punto de jubilarse que lleva el servicio en sus venas. Una actuación precisa, abordando diferentes registros, desde el hombre de acción, padre preocupado y sincero o más comedido (en el hospital).

Con respecto a Andy García, que parece ser un actor amado y odiado a partes iguales, sólo me remitiría a la escena en que discute con James Gandolfini, que me parece, por parte de ambos, sencillamente brillante. En cuanto a Lena Olin, correcta, tiene un rol bastante secundario, pues su relación está tratada un poco de fondo.

Lumet apunta en su recurrente tema de quienes rompen la legalidad a pesar de ser servidores de ella, introduciendo como novedad una relación paterno-filial de muchos quilates.

La película está estructurada en dos grandes bloques: el primero, el asalto, la detención y juicio a Jordan, el peligroso gangster, y una segunda más reflexiva, consecuencia de la anterior, que aborda la corrupción policial, y el dilema entre lo legal (lo que dicta la ley), es decir, servir escrupulosamente las normas o hacer lo que dicta la conciencia. Un entramado complejo que Lumet resuelve con gran solvencia y mano de maestro.

Lo mejor, las secuencias de acción (tiroteo descarnado, breve, real y sin adornos) y las discusiones del trío Garcia-Holm-Gandolfini.

Película muy interesante.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Gabriel Ufa
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow