Resulta curioso que si observamos con detenimiento el reparto de "En guerra con mi abuelo", la cosa apunta mejor que bien: Robert De Niro, Uma Thurman, Christopher Walken, Jane Seymour, Eugene Levy o Cheech Marin. De todo un poco y todo bien. Seguimos con el director Tim Hill y vemos que casi toda su filmografía son capítulos de la serie de animación de Bob Esponja. Bueno, no seamos clasistas. Quien es buen artesano se defiende en cualquier género. Seguimos con los guionistas, Tom J. Astle y Matt Ember que lo mejor que han hecho juntos es el guion de "Superagente 86, la película". De acuerdo ¿y si le damos una oportunidad a la película?

Que gran error...

A los diez minutos de metraje ya sabes que la cosa no pinta bien, el guion hace aguas por todos lado y observamos, entre la pena y la vergüenza ajena a un Robert De Niro se ahoga en un mar de mediocridad.

No es que "En guerra con mi abuelo" sea una película infantil (que lo es) sino que "En guerra con mi abuelo" es una película mala. Soberanamente mala. Tan mala que invita a seguir viéndola a ver hasta donde llega el desastre.

Y ojo: no está mal dirigida y algunos actores defienden sus papeles con dignidad... pero es que el guion es malo de solemnidad. Tan malo que uno se pregunta en qué estarían pensando los guionistas cuando pertrechaban tal despropósito y en que estarían pensando los productores cuando metieron dinero en algo así. Imagino a los productores diciendo "vale, este guion es una mierda, pero contratamos a De Niro y la gente irá al cine".

Pues no, mejor no vayáis al cine... ni tampoco la veais en casa.