Dirigida por Mike Flanagan (Dr, Sueño), "Misa de medianoche" es el cuarto trabajo del director para Netflix tras las brillantes "La maldición de Hill House", "La maldición de Bly Manor" y "El juego de Gerald". La historia nos traslada a una pequeña isla de pescadores llamada Crockett Island sumida en una profunda crisis tanto económica como de fe, allí regresa tras salir de la cárcel Riley Finn (Zach Gilford, visto en la memorable "Friday night ligths"), y también el padre Paul (Hamish Linklater), que remplaza al antiguo sacerdote trayendo consigo una serie de extraños sucesos que son confundidos por muchos como auténticos milagros. Poco mas se puede contar sobre la trama ya que el gran aliciente de la misma se basa en ir descubriendo todos los detalles y giros con los que nos va sorprendiendo Flanagan. Los primeros capítulos pueden parecer un poco lentos porqué se centran básicamente en la presentación y desarrollo de los personajes con conversaciones muy largas y profundas apoyadas en las brillantes interpretaciones sobre todo de Hamish Linklater, Zach Gilford, Annabeth Gish, Michael Trucco o Kate Siegel (esposa del director), es a partir del capítulo cuatro cuando la serie da un giro apareciendo por fin los sucesos sobrenaturales y algún que otro susto llevándonos hacia un sorprendente final.
La serie explora con mucho acierto temas como las adicciones, la redención, la culpa o el fanatismo religioso convirtiendo todos estos dramas que sufren los personajes en el verdadero terror del día a día en la isla.
En resumen, "Misa de medianoche" es para mí opinión el mejor trabajo de Mike Flanagan y una de las series del año, muy recomendable.