Haz click aquí para copiar la URL
España España · Lleida
Voto de Uma:
8
Drama En una mansión, cuatro señores se reúnen con cuatro exprostitutas y con un grupo de jóvenes de ambos sexos, partisanos o hijos de partisanos, que han sido hechos prisioneros. Nadie en la casa puede eludir las reglas del juego establecidas por los señores; toda transgresión se castiga con la muerte. Además, ellos gozan de la facultad de disponer a su antojo de la vida de los cautivos. (FILMAFFINITY)
21 de agosto de 2023
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Da asco ver esta película, como dan asco algunas de las cosas que han ocurrido y ocurren en el mundo. Todo en esta película está escogido con mucho atino para que la composición del fresco o del retablo, incluya a todos, a los que mandan sin ningún escrúpulo, a los que colaboran, a los que miran a otra parte, a los que se convierten en objetos de los que se alimentan los poderosos, a los que no soportan semejante composición del mundo, a los que sobreviven, a los que mueren con dignidad... Hay detalles que amplifican el impacto: las maneras educadas, cultas y refinadas de los sádicos, pura paradoja (si se jode al prójimo, se hace con estilo, civilizadamente), que interpretan a su antojo a los pensadores, porque ellos escriben la historia; el amor, clandestino, diverso y breve; las narradoras de historias, que alimentan al grupo de un entretenimiento pornográfico, que es el que vende; la capacidad de adaptación de los individuos, incluso en las más terribles condiciones, gracias a un instinto de supervivencia, algo con lo que cuentan los sádicos, y de ahí, al empobrecimiento de los valores humanos básicos: cuando los sometidos empiezan a delatarse, toda esperanza se va a la mierda; la destrucción de la belleza; la inutilidad de la dignidad...

La filmación de esta locura humana por parte de Pasolini, no puede dejar de ser admirada, incluso por los que desprecian la película: escenas que vemos desde la lejanía, otras desde la corta distancia, un juego de cámara y espacio, que nos hace testigos, casi partícipes, en la justa medida, de cada situación, de cada explotación, aumentando con ello su ubicación (más política, más íntima, más "legal", más secreta); la exhibición del poder, con sus marchas y sus ritos, sus excentricidades, coreografiando su falsa solemnidad; la exhibición paralela del sometimiento y la humillación, tan angustiosa; el concepto de ley, hecho a imagen y semejanza de los sádicos, a imagen y semejanza de los poderosos, quienes escapan al control de toda norma para quedar impunes. Especialmente brillante conceptualmente son las escenas que nos ponen tras los binóculos, mirando desde la lejanía los mayores horrores, cual si estuviéramos viendo la tele, confundiendo al espectador con el personaje: ¿quién no mira con avidez esas escenas? ¿Quién no mira en las noticias las imágenes cuando nos advierte el presentador que pueden herir nuestra sensibilidad? La película nos interpela para que sintamos asco de nosotros mismos.

Crítica explícita del fascismo, aunque vista hoy, acaso tenga aún mayor amplitud, como debió planearla en su momento Pasolini, posiblemente, porque, comunista, intelectual, homosexual como era, comprometido políticamente hasta la médula, podemos adivinar que en realidad nos exponía, con el fin de que sintiéramos asco, cómo funcionan las cosas en realidad, cómo vivimos en un mundo de poderosos que someten a otros sin ningún pudor, en un mundo donde el bienestar de un sistema se sostiene sobre el sometimiento de otras partes del mundo. No hay que ser tan listo para verlo, aunque lo cierto es que preferimos no enterarnos: de dónde viene la ropa que nos ponemos, de dónde sale el oro que compramos, y los diamantes y tantas otras cosas. Este es un mundo institucionalmente sádico, con una cara bonita y otra muy oscura. Esta película es un manifiesto político de Pasolini, el más hiriente que se ha hecho nunca. Y está tan bien filmado, que cuesta verlo, por las escenas tan desagradables que tenemos que contemplar y por lo que significan.
Uma
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow