Lean el libro, por favor, y verán cómo resulta de ridícula esta película. El director no sabe nada de rodar, ni apenas tiene sensibilidad. Es una sucesión de videoclips que atentan contra la naturaleza misma del impresionante monumento literario de Hugo. Si quieren llorar de verdad, lean, lean. Pobre hasta la locura, en escenarios, en movimientos de cámara, en decorados deudores del musical, la película la salva la música y Anne Hathaway.. Del resto olvídense. Lean, lean y luego critiquen. Y sí, Carol Reed y David Lean habrían hecho algo increíblemente hermoso.