Esta película, que tiene una premisa muy interesante, se lanza al vació por las sendas más trilladas y aburridas. Por ejemplo, en "El Doctor Chiflado" Jerry Lewis daba una lección sobre las etiquetas sociales y la tensión de ser uno mismo (como Shrek o como Little Miss Sunshine).
Pero nada, aqui la cosa no va de esto (o de algo un poco más imaginativo). La cosa es lo peligroso que es tomar drogas, los problemas con la novia, la gestión de tiburones (Robert De Niro: lo mejor en su intervención entre el "don" y el "aprendizaje", 2 min de buen cine y de gloria: por eso pongo un 4, que si no...) y con los diversos traficantes.

Y de una premisa interesante, vemos un thriller con ínfulas de sofisticación, pero del montón, trillado y previsible. Y lo del final: sin palabras. Moralina engañosa y trampa (¿alguien lo entiende?). En fin, Neil Burger ha hecho una especie de "El Cisne Negro" con Bradley Coooper. Una pequeña ida de olla, con muchos primeros planos para que veamos lo guapo que es y los ojos tan azules que tiene. Pues estupendo, pero no suficiente para armar una buena película. Además la fotografía es rutinaria, la banda sonora del montón y el montaje/planificación de peli de los teletubis.

Eso si, el tema de la película "no tomes drogas", lo suscribo. Con un tema así, un buen director y un buen guión (en esta peli, inexistente) habrían hecho algo mucho más interesante