Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Francisco Javier Millan:
8
Comedia. Drama Todos los miembros de la familia Bélier son sordos, excepto Paula, de 16 años. Ella hace de intérprete para sus padres, especialmente en lo que respecta al funcionamiento de la granja familiar. Debido a que a Paula le gusta un chico del instituto, se apunta como él al grupo del coro. Allí descubrirá su talento para el canto... (FILMAFFINITY)
7 de mayo de 2015
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Debo estar haciéndome mayor, pero cada vez me gustan más este tipo de películas europeas donde la humanidad y lo emocional destilan por todos los costados.
Reconozco que la historia la he visto ya, no en vano continua en parte el mismo esquema de “Billy Elliot”. Mientras que la película de Stephen Daldry su protagonista gritaba a los cuatro vientos “¡Quiero bailar!”, la protagonista de esta cinta francesa “¡Quiere volar!” a través de sus inesperadas habilidades en el canto.
La historia arranca de una manera alocada, presentándonos a una familia de sordomudos que parecen estar en una crisis nerviosa constante, pero el guión no tarda en enderezarse y logra atraparte.
Más allá de un mensaje sobre los discapacitados auditivos, la película tiene una bonita moraleja sobre la familia y sobre como los hijos deben aprender a volar más allá del entorno protegido de los padres.
El alma mater de todo es Michel Sardou y su hermosa canción “Je Vole”, además de otros muchos temas que aparecen a lo largo del relato. Creando un drama, que casi es un musical en algunas ocasiones, alcanzando su mejor despliegue en el momento en que los espectadores sentiremos la falta de audición en una de las escenas. Probablemente la mejor de todas, junto a la del casting de la protagonista.
Toda una sorpresa la joven actriz Louane Emera. Su Paula Bélier es sinónimo de absoluta emoción, sobre todo en el tramo final. Ella es los oídos y la voz de sus padres, una oyente en un mundo sin sonido, donde encima ella decide expresarse a través del canto.
Es curioso descubrir como Emera es todo un fenómeno en su país, al haber triunfado en el reality “La voz Francia”.
La película lo tiene todo, tiene drama (suave), mucho de comedia francesa (impagables los momentos electorales del padre y la alergia al látex del hermano) y una pizca de lágrima fácil, pero sin cruzar la línea.
Es de esos títulos ideales que te hacen comprender que lo más importante es luchar por tus propios sueños, dejando atrás si es necesario cualquier tipo de alineación social o familiar.
Una más que agradable sorpresa que algunos puede que vean convencional. Pero qué queréis que os diga, a veces necesito de esta clase de historias para ver que no todo está perdido en esta vida.
Francisco Javier Millan
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow