Una serie de investigación forense cuyos casos objeto de estudio son los crímenes en la Marina de los EEUU. Planteada así, la serie parece prometer escenarios en donde barcos, aviones e instalaciones navales son elementos imprescindibles para unas tramas llenas de intrigas militares en donde el espionaje no ha de faltar, cosas que no pasan. En cambio de eso la serie plantea anodinos casos casi exentos de intriga y emoción en ámbitos terrenales.

La serie intenta ser casi una copia de la serie de competencia "CSI: Crime Scene Investigation" pero no llega a ser siquiera similar pues todo es de peor calidad.

El plantel actoral cuenta con actores del montón, incluso el que interpreta al principal Mark Harmon es bastante malo.

Los personajes además de estar estereotipados también están mal armados.

Una serie muy floja, pero no tan mala como la mayoría de las series de Netflix.