Haz click aquí para copiar la URL
España España · Valladolid
Voto de vircenguetorix:
7
Drama. Intriga. Thriller Tom Ripley (Matt Damon), un joven empleado de una empresa de servicios de Manhattan, pide prestada una chaqueta de Princeton para tocar el piano en una fiesta. Cuando el rico propietario de la casa charla con él, Ripley le hace creer que es amigo y compañero de universidad de su hijo Dickie (Jude Law); entonces, el padre ofrece a Tom mil dólares si va a Italia y convence a Dickie para que regrese a casa. Cuando conoce a Dickie, que es ... [+]
20 de julio de 2009
47 de 51 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando se estaba empezando a rodar la futura aclamadísima “El paciente inglés”, su director Anthony Minghella conoció la muerte de Patricia Highsmith, una escritora a la que había leído desde niño, y que como buen oriundo italiano siempre le fascinó el personaje de Tom Ripley y sus andanzas en la tierra de sus padres,

Desde aquel momento ya empezó a barruntar que tendría que homenajear uno de sus libros y autores favoritos tarde o temprano. Precisamente el éxito de “El paciente inglés” fue el que le permitió mayor libertad y elección para embarcarse en esta adaptación de “El talento de Mr. Ripley”.

Hay muchos amigos de la web que siguen comparando la película de Minghella con la francesa de “A pleno sol”. La de Clément, era una muy buena película, pero estaba alejada diametralmente del texto literario. En cambio esta no, no voy a negar que hay licencias, sobre todo en la ausencia de premeditación de Ripley a la hora de cometer su primera gran fechoría, y algunas más, pero en general es una buena versión que se ajusta mucho al libro, y eso siempre se agradece.

En cualquier caso hay que disfrutar de un personaje amoral y monstruoso como Tom Ripley, capaz de mentir y engañar a todo el mundo todo el tiempo, en contra de lo que decía Abraham Lincoln. La película está dividida en tres partes, la primera la festiva, la “dolce vita”, la segunda a raíz del suceso donde encontraríamos toda la parte de intriga y suspense, y en último lugar el desgarrador drama humano del final, un acercamiento a la locura, la carencia de sentimientos y la psicopatía. Su resultado es irregular, con momentos cercanos al tedio y a la pretenciosidad hueca, y otras de una arrebatadora y turbulenta claridad mental.

Magníficas interpretaciones, excelentes localizaciones y un trato exquisito por los detalles y el buen gusto, que convierten el fallecimiento de Anthony Minghella, en una de las mayores tragedias luctuosas de los últimos años, si tenemos en cuenta todo lo que le podía quedar por delante.

Nota: 6,8.
vircenguetorix
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow