Bolt, al igual que asesinos locos, actúa movido por un engaño a si mismo. El hecho de que le engañen haciéndole creer que es un perro con poderes de verdad es un engaño que le destartala la mente un poco, hecho que afirma que el título de mi crítica es políticamente correcto. Bolt es más que una película buena más de animación, una road-movie animada con unos fotogramas bastante bien hechos. No he visto Wall-e, ardo en deseos de verla, pero hasta entonces me quedó con esta última genialidad de Pixar como la mejor película del año de animación. La película refleja la amistad y el esfuerzo de un perro por rescatar a su dueña, secuestrada en anteriores capítulos, todo mezclado con esa ternura que sólo Pixar sabe transimitir. En esta película la ternura es algo que tiene prioridad desde el principio hasta el final. La primera escena muestra a Bolt en la tienda y como viene la niña cuyo nombre no recuerdo y se quedan mirando con cara de eterna compasión formando lagos de lágrimas en los ojos de la gente sensible. He de decir, y no nos vamos a engañar, la historia en si es algo infantil, pero es que todas las personas tenemos nuestro niño pequeño, nuestro Peter Pan personal en el corazón, niño pequeño que se pierde si no prestamos atención a grandes películas para pequeños espectadores como esta. Uno de los elementos de las películas de Pixar que se mantiene aquí son las relaciones entre personajes que van apareciendo, son relaciones que nos demuestran como son las personas en la vida real, falsas, mentirosas, pero también demuestra que siempre quedarán buenas personas. No sé si me he explicado bien, porque es un efecto que cada uno entiende como quiere y es difícil de explicar. Bolt, aun siendo una película de niños, es la odisea de un perro, oda a Estados Unidos se puede entender, debido a ciertas escenas que no comentaré aquí. Es un viaje a través de América, guiados por una servilleta con un mapa. Es la visión de América a los ojos de un perro, un ser que no piensa, aunque en esta película sí. La banda sonora es una Disneylada que está bien sin llegar a emocionar. Aun así la respeto dado que es una música para los peques que la vayan a ver.
Muy recomendada.