Haz click aquí para copiar la URL
España España · Sevilla
Voto de Bukowski:
8
Drama Cuando el 'New York Day' está a punto de ser vendido por sus propietarios, Ed Hutcheson, el editor del periódico, decide sacar a la luz los turbios negocios de un importante jefe mafioso. (FILMAFFINITY)
26 de junio de 2009
14 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Que yo sepa, El cuarto poder (Deadline USA) es la primera película de Richard Brooks. Una película que, como muchas otras a lo largo de la historia del cine negro, trataron de una forma u otra el tema del periodismo. La película, que no llega a la hora y media de duración, narra la historia de un periódico serio, The Day, cuyo redactor jefe, Mr. Hutcheson, está interpretado por Humphrey Bogart. Este periódico está a punto de ser comprado por una cadena de corte más amarillista y que Bogart desprecia, ya que las hijas del dueño no quieren saber nada del asunto de las noticias.

Bogart está tremendo, como siempre, con sus frases lapidarias y su sonrisa sardónica y su capacidad empática. Pero, dirá el avispado lector, esto no es suficiente para salvar la película. Pues no, supongo que no. A pesar de los defectos que tiene, que los tiene (un final un poco extraño, el protagonista femenino metido medio con calzador, …), El cuarto poder es una gran película.

Y lo es no sólo por poder mirar con cierta nostalgia el amor que la industria del cine de EEUU sentía por el periodismo. El cuarto poder es una película que te mantiene completamente atrapado, cuyo guión de ritmo está perfectamente planificado. Y más allá de los motivos técnicos, porque ésta es una de ésas películas que animarían a cualquiera a ser periodista. En esta cinta se nos habla de la cohesión de los miembros de una redacción, de la amistad, del honor, del deber en el trabajo pero, sobre todo, de lo que es sentir amor por un oficio y un compromiso por contar la verdad, que debería hacer suyo cualquier periodista, pero que lamentablemente está muy venido a menos. Aderezado con su mijita de investigación, de mafiosos italoamericanos dedicados oficialmente al ladrillo (¿a alguien le suena?) y su chica inocente asesinada. Y Bogart.
Bukowski
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow