Políticamente incorrectos. Tremendamente divertidos. Hoy en día serían pasto de ataques de estos censores que se preocupan de que lo que oígamos no ofenda a ningún colectivo. Uno de sus temas punteros de titulaba "Mongoloide" y el estribillo rezaba: "Mongoloide, mongoloide, un cromosoma de más". Ahora arderían en la hoguera mediática y de la sinrazón en la que vivimos.

Adorados por Servando Carballar y su "Aviador Dro y sus obreros especializados", los "Devo" eran libertad creativa, sin limitaciones intelectuales absurdas y con grandes dosis de humor negro. Era la New Wave. Recuerdo ver sus videoclips en el mítico programa de Carlos Tena y Diego Manrique "Popgrama", en la 2. En la radio y en la primera cadena teníamos a las folclóricas, a Engelbert Humperdink, a Danny Daniel y a Julio Iglesias, con sus pantalones patas elefante, su camisa abierta luciendo pelusa y sus chaquetas color crema, o bien a melenudos de temas inacabables y virtuosos. Por suerte llegó la new wave. Y los Devo eran lo más, aunque aquí apenas se conocieron.

Este videoclip muestra todo aquello que distinguía al grupo de los otros: su innegable humor negro y mala baba, su puesta en escena, con un vestuario -un uniforme- de lo más original e inclasificable, transgrediendo las limitaciones para ilustrar un tema pop: latigazos, sexo y rednecks. Un universo propio. El universo de Devo.