“Un cuerpo pequeño de espíritu determinado encendido por una inquebrantable fe en su misión, puede alterar el curso de la historia”.
Así aparece Gandhi en Sudáfrica, con esa filosofía tan simple. Su bombilla se enciende en un vagón de primera clase, donde es expulsado por el simple hecho de tener un color de piel diferente. Ahí empieza su lucha contra el sistema establecido, en contra y ante la “estupefacción” de todos.

“Incluso si eres uno en minoría, la verdad es la verdad”.
La verdad es un arma que duele y que a los que tienen el poder les cuesta escuchar. Hay leyes que no son justas que, gracias a hombres como Gandhi, pudimos suprimir.

"La violencia es el miedo a los ideales de los demás".
Solo así se explica la Masacre de Amritsar, por obra y gracia del General Dyer. Matar a civiles solo porque no te obedecen, es la manifestación más grande de miedo.

"Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa."
El arma más poderosa que tenía: sus 17 huelgas de hambre; la última, contra sus propios compatriotas.

"Si quieres cambiar el mundo, cámbiate a ti mismo".
Se despojó de sus ropas occidentales y empezó a vivir como sus hermanos. Y dejó de lado a los siervos para servir.

"Ojo por ojo y el mundo acabará ciego."
Explicación a cómo responder si, ante una injusticia, te golpean. Te golpean porque tienes razón. Responde con razón, no con golpes. Porque si no estás de acuerdo con sus métodos, no te unas a ellos.

"Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino".

"Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena".
Eso es lo que ocurre con la violencia doméstica, el acoso escolar y también laboral. Los buenos sufren mientras todos callamos.

"Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia."
Así comenzó su última huelga de hambre, avergonzado por la lucha entre hindúes y musulmanes bajo la misma bandera de la India.

“La pobreza es la peor forma de violencia”.
Desgarrador. Aquellas gentes, abandonadas a su suerte porque los británicos traían las telas de sus fábricas, obligados a seguir pagando un tributo.

“Podéis encadenarme, podéis torturarme, podéis destruir este cuerpo, pero nunca encarcelaréis mi mente”.
Grandiosa definición de la descripción del motivo de su lucha.