Media votos
6.4
Votos
233
Críticas
6
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Alejandro:
1
6.1
43,213
Ciencia ficción. Fantástico. Aventuras. Acción
La malvada Primera Orden se ha vuelto más poderosa y tiene contra las cuerdas a la Resistencia, liderada por la General Leia Organa (Carrie Fisher). El piloto Poe Dameron (Oscar Isaac) encabeza una misión para intentar destruir un acorazado de la Primera Orden. Mientras tanto, la joven Rey (Daisy Ridley) tendrá que definir su futuro y su vocación, y el viejo jedi Luke Skywalker (Mark Hamill) revaluar el significado de su vida. (FILMAFFINITY) [+]
17 de diciembre de 2017
169 de 236 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es mi primera crítica aquí, y lo hago expresa e intencionadamente para mostrar mi más total y absoluta repulsa a esta falta de respeto que nos han colado dentro del universo Star Wars.
No fui de los qué vilipendió Episodio VII, es más, lo defendí y defiendo como un regreso mucho más que digno de la saga pero esto.... ¿pero esto qué es?
En el Episodio VII se sentaron unas bases suficientes para seguir evolucionando la historia a la vez que ir generando nuevas intrigas, dudas, hipótesis, momentos... y en el Episodio VIII se han cargado toda la esperanza y expectativas de un plumazo, generando un engendro cómico que deja bien parado al odiado Jar Jar Binks.
Es una falta de respeto a personajes tan míticos y esenciales como el mismísimo Luke Skywalker, que ahora es una caricatura de sí mismo y es una falta de respeto a los espectadores y fans por querer colarnos esta ingente tomadura de pelo dentro del universo Star Wars.
Tener en la retina decenas de momentos de Rogue One, para mi una de las mejores (si no la mejor de toda la saga, aunque esté dentro de los Spin Off) me daba esperanzas de que Disney seguiría en ese camino que tanto nos enamoró a todos (o casi todos), pero no. No hay nada de Rogue One en el Episodio VIII, absolutamente nada. Es más, tras esto empiezo a mirar con otros ojos La Amenaza Fantasma, haceros una idea.
Me resulta complejo seguir criticando sin hacer spoilers. Hay momentos buenos, algunos de ellos en la isla donde está Skywalker, pero cuando crees que no te podían volver a colar alguna chorradita graciosa van y lo hacen, estropeando con ello importantes momentos que deberían haber sido épicos, serios y sin coñas de ningún tipo. Me enfada mucho, mucho.
No fui de los qué vilipendió Episodio VII, es más, lo defendí y defiendo como un regreso mucho más que digno de la saga pero esto.... ¿pero esto qué es?
En el Episodio VII se sentaron unas bases suficientes para seguir evolucionando la historia a la vez que ir generando nuevas intrigas, dudas, hipótesis, momentos... y en el Episodio VIII se han cargado toda la esperanza y expectativas de un plumazo, generando un engendro cómico que deja bien parado al odiado Jar Jar Binks.
Es una falta de respeto a personajes tan míticos y esenciales como el mismísimo Luke Skywalker, que ahora es una caricatura de sí mismo y es una falta de respeto a los espectadores y fans por querer colarnos esta ingente tomadura de pelo dentro del universo Star Wars.
Tener en la retina decenas de momentos de Rogue One, para mi una de las mejores (si no la mejor de toda la saga, aunque esté dentro de los Spin Off) me daba esperanzas de que Disney seguiría en ese camino que tanto nos enamoró a todos (o casi todos), pero no. No hay nada de Rogue One en el Episodio VIII, absolutamente nada. Es más, tras esto empiezo a mirar con otros ojos La Amenaza Fantasma, haceros una idea.
Me resulta complejo seguir criticando sin hacer spoilers. Hay momentos buenos, algunos de ellos en la isla donde está Skywalker, pero cuando crees que no te podían volver a colar alguna chorradita graciosa van y lo hacen, estropeando con ello importantes momentos que deberían haber sido épicos, serios y sin coñas de ningún tipo. Me enfada mucho, mucho.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
La crítica bien merece hacerse entera dentro del apartado spoiler, pues es un despropósito de principio a fin, y poco voy a aportar aquí que ya no se haya dicho.
-El todopoderoso Snoke, cuyo origen tanto nos ha dado que pensar, no es tan todopoderoso, su origen ya no importa, y se lo cargan de un plumazo en una escena más triste que épica en la que el dubitativo Kylo Ren es tan superpoderoso como para engañarlo haciéndole creer que lo que lee en su mente es justo lo contrario de lo que va a hacer. Ese super Ren, por contra, es incapaz de quitarle un mísero sable láser a una "hija de chatarreros". ¿Y qué sacamos de todo esto? Nada, no se puede sacar nada, porque si lo piensas te dan ganas de matar a alguien con tus propias manos.
-El planeta "casino" es otra coña que chirría hasta el esperpento. Parece claro que hay que meter una cantina en cada episodio pero ... ¿esto? . BB8, cuyo personaje es simpático y entrañable, también es vilipendiado en la película. Primero es tratado como una tragaperras, luego se convierte en un alma letal con las cientos de fichas que le habían colado dentro.
-El proceso de "entrenamiento" de Ray en la isla es de coña. Los pollos, con más minutos en la cinta que el propio Chewbaca, se encargan de ir estropeando momentos que podían haber sido interesantes. Tampoco ayudan nada esas protectoras de las edificaciones, que aparecen de la nada cuando menos falta hace que aparezcan, igualmente para estropear momentos intensos, como ese en el que Ray contacta telepáticamente con Ren, dispara su blaster haciendo un agujero en la pared y Skywalker, medio atontado, ni se las ve venir comentando que "se van a efandar".
-Cuando no supe si reir o llorar fue con el regreso de Leia a la nave tras haber salido disparada al espacio exterior tras una explosión. Al principio me pareció una muerte aceptable, lo que no toleré fue su capacidad de vuelo espacial de regreso a la nave. ¿Estamos de coña?
-Maz Kanata.... ¿que pinta aquí? ¿Que coña de videoconferencia es esa?
-Dameron y Finn ahora son unos payasetes. En el episodio VII Poe tiene ciertas frases cargadas de sarcasmo, cercanas a lo cómico, pero moderadas, bien interpretadas y en los momentos adecuados. Igual ocurre con Finn. Ahora ya no hay moderación, mesura ni control, ambos tienen que hacer el payasete en cada puñetero diálogo que les toca interpretar. Adiós al dramatismo de los momentos.
-Hablando de dramatismos, otro de los momentos en los que no supe si reir o llorar fue con el regreso de Leia tras su convalecencia tras el inesperado vuelo espacial y es que la princesa reaparece en escena con todo un aparatoso vendaje en la cabeza que, entiendo yo, nos debe recordar que ha estado malita. ¿Era necesario?
Necesitaría mucho más espacio para seguir y seguir porque cada potencial momento bueno que podía haber tenido la película se los han cargado con esta filosofía de "la risa".
Como veréis poco he hablado del argumento y en torno a qué gira todo y es que, tristemente, importa poco. Te cuesta entrar en la película, pero una vez dentro sabes que no tienes escapatoria, que no va a mejorar, simplemente quieres que termine antes de que sigan destrozándolo todo.
-El todopoderoso Snoke, cuyo origen tanto nos ha dado que pensar, no es tan todopoderoso, su origen ya no importa, y se lo cargan de un plumazo en una escena más triste que épica en la que el dubitativo Kylo Ren es tan superpoderoso como para engañarlo haciéndole creer que lo que lee en su mente es justo lo contrario de lo que va a hacer. Ese super Ren, por contra, es incapaz de quitarle un mísero sable láser a una "hija de chatarreros". ¿Y qué sacamos de todo esto? Nada, no se puede sacar nada, porque si lo piensas te dan ganas de matar a alguien con tus propias manos.
-El planeta "casino" es otra coña que chirría hasta el esperpento. Parece claro que hay que meter una cantina en cada episodio pero ... ¿esto? . BB8, cuyo personaje es simpático y entrañable, también es vilipendiado en la película. Primero es tratado como una tragaperras, luego se convierte en un alma letal con las cientos de fichas que le habían colado dentro.
-El proceso de "entrenamiento" de Ray en la isla es de coña. Los pollos, con más minutos en la cinta que el propio Chewbaca, se encargan de ir estropeando momentos que podían haber sido interesantes. Tampoco ayudan nada esas protectoras de las edificaciones, que aparecen de la nada cuando menos falta hace que aparezcan, igualmente para estropear momentos intensos, como ese en el que Ray contacta telepáticamente con Ren, dispara su blaster haciendo un agujero en la pared y Skywalker, medio atontado, ni se las ve venir comentando que "se van a efandar".
-Cuando no supe si reir o llorar fue con el regreso de Leia a la nave tras haber salido disparada al espacio exterior tras una explosión. Al principio me pareció una muerte aceptable, lo que no toleré fue su capacidad de vuelo espacial de regreso a la nave. ¿Estamos de coña?
-Maz Kanata.... ¿que pinta aquí? ¿Que coña de videoconferencia es esa?
-Dameron y Finn ahora son unos payasetes. En el episodio VII Poe tiene ciertas frases cargadas de sarcasmo, cercanas a lo cómico, pero moderadas, bien interpretadas y en los momentos adecuados. Igual ocurre con Finn. Ahora ya no hay moderación, mesura ni control, ambos tienen que hacer el payasete en cada puñetero diálogo que les toca interpretar. Adiós al dramatismo de los momentos.
-Hablando de dramatismos, otro de los momentos en los que no supe si reir o llorar fue con el regreso de Leia tras su convalecencia tras el inesperado vuelo espacial y es que la princesa reaparece en escena con todo un aparatoso vendaje en la cabeza que, entiendo yo, nos debe recordar que ha estado malita. ¿Era necesario?
Necesitaría mucho más espacio para seguir y seguir porque cada potencial momento bueno que podía haber tenido la película se los han cargado con esta filosofía de "la risa".
Como veréis poco he hablado del argumento y en torno a qué gira todo y es que, tristemente, importa poco. Te cuesta entrar en la película, pero una vez dentro sabes que no tienes escapatoria, que no va a mejorar, simplemente quieres que termine antes de que sigan destrozándolo todo.