Estupenda historia construida en un original mundo de billares, donde todos son, en su raíz, infelices y con problemas para ver su pasado y como influye éste en sus presentes. Maravillosas interpretaciones de la Verdú y la Portillo que transmiten una humanidad, unos personajes pegados al suelo, a la realidad. Impagables las colaboraciones de los demás personajes: Castejón, Barea, Villén, Vindel, Arévalo dan a sus personajes un punto de carne y hueso que hace mucho tiempo no veíamos en una pantalla. La historia va de menos a más y el crecimeinto narrativo va paralelo a la intensidad con que la Verdú y la Portillo meten presión a sus personajes.