No es la primera vez que el maestro Clint Eastwood se pone detrás de la cámara para ofrecernos un biopic sobre la vida y la obra de músicos, como en la excepcional "Bird". Aquí se embarca en narrarnos la vida de "The four Seasons", cuatro chicos del barrio de Jersey íntimamente ligados con la Mafia desde sus inicios hasta su desaparición, encabezados todos ellos por su solista, Frankie Valli, que gozaron de un gran éxito en los años sesenta y que pertenecen por derecho propio al "Salón de la Fama".

Eastwood nos lo va presentando desde que el grupo se une, con una sucinta biografía de cada uno de ellos y aprovechando flashback para llevarnos del presente al pasado para incidir en algún suceso importante que se niega a olvidar.

Actores prácticamente desconocidos a excepción de Christopher Walken en el papel de viejo mafioso que los apadrina en sus inicios y que está presente siempre a lo largo de sus vidas. Y todo ello, salpicado de los temas que les hicieron famosos, con actuaciones en diferentes ciudades y locales para adornar esta obra menor de uno de los grandes genios de la dirección.

Mi nota, un 6.