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Seychelles Seychelles · Cierzópolis
Voto de Juanjico Lawless:
10
Thriller. Drama El juez Robert Wakefield es nombrado por el Presidente de los Estados Unidos supervisor de los grupos de lucha contra la droga y de su coordinación con las autoridades mexicanas. Sin embargo, su satisfacción inicial por su prestigioso cargo se esfumará cuando descubra que su hija de 16 años se ha convertido en una drogadicta. Mientras tanto, al sur de la frontera, el agente mexicano Javier Rodríguez intenta librar su propia batalla contra la droga. (FILMAFFINITY) [+]
15 de junio de 2009
7 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
La primera vez que la vi, fue en pantalla grande. Impresionante. El sonido llenaba todo aquello, oscuro, con las butacas cómodas, con ganas de devorar cine. Aquella fue también la primera vez que veía una película de Soderbergh. Cierto es que hasta un tiempo después no supe quien era y ni tan siquiera que había hecho otras cosas antes. Pero aquella primera vez me impresionó. Esos movimientos de cámara, ese mundo amarillento. Todo era nuevo para mí y era maravilloso. Estaba obnubilado pro aquel estilo, por aquella maestría que tenía el tito Soderbergh.

Benicio del Toro. Otra primera vez. Posiblemente no fuese la primera vez que le veía, pero si fue la primera vez que reparé en el. Y me quedé prendado. Aquello era actuar y ser uno con el personaje. Un genio de la interpretación recién descubierto por el menda. ¡Que tío! Que impresión verle ahí, interpretando como si fuese el realmente, como si el resto de actores hasta el solo fuesen meros aficionados.

Aquella genialidad de película sobre historias que se cruzan con un denominador común se clavo en mí y se mostró poco perecedera. Tan solo lo suficiente como para tener ganas de verla de vez en cuando para deleitarme con sus imágenes. Duras, pero bellas. Muy duras, incluso, pero siempre esperanzadoras.

A uno y otro lado de la ley y de la frontera, cada individuo con sus propias motivaciones lucha por cumplir sus sueños. O por acallarlos. El límite en cualquier caso son las ganas y por encima de ellas, el dinero. Siempre el dinero. Pero cuando te enseñan algo tan crudo de esta forma, no solo detestas al sistema, sino que te enamoras del cine. Es una sensación extraña.
Juanjico Lawless
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