Si el desarrollo de una premisa presenta un mínimo de enjundia, pienso que el género 'erótico' pasa a ser subyugado por el drama romántico, a no ser que consideremos que el destape en sí es más interesante que la historia que se quiere contar. No obstante a raíz de lo que leo en algunas críticas hay gente tiene una opinión distinta y que la principal diferencia que establecen entre una película puramente pornográfica y una considerada erótica es que conciben la última como pornografía con factura y reparto de lujo. Cierto es que está cinta tiene muchos momentos subidos de tono, algunos bastante logrados, pero aunque solo sea por alejarme lo más posible de esa banalización me seguiré refiriendo a ella con drama romántico.

Drama romántico que va de más a menos, de hecho los dos primeros tercios son buenos o al menos emocionalmente no me sale un balance negativo (hay muchas escenas conseguidas, creo que la que más me gusta es cuando se vieron por primera vez, esa manera de Rourke, aparecido en escena completamente por sorpresa, todo un prodigio de labor directiva, de fusilarla con su persistente es imposible que deje indiferente). Un detalle importante de esta película es que se habla poco, es un espectáculo cinematográfico que persigue estimular a través de otros sentidos que el del oído, y usar otra herramienta que la palabra. Muchos de los juegos eróticos introducidos por Lyne son curiosos y su ejecución, conseguida, transmite. Destaco el de la comida y cuando la hace disfrazarse de hombre y la habla como si fuera a un amigo, comentando cosas como por ejemplo que ha conocido a una mujer que tiene un culo descomunal (siendo obviamente ella misma la aludida). Con todo, se nota el deje comercial, y el hecho de que en los últimos 30-40 minutos el interés se vea diluido confirma el hecho de que al fin y al cabo de trata de una película insustancial. Como apunte, en el minuto 40, la canción que estaba sonando cuando ella se estaba masturbando a solas la he encontrado dantesca.