"Dead set" es una perita en dulce para los amantes del género zombie con todos esos ingredientes que tanto nos gustan a los que de vez en cuando disfrutamos de ver como gente se come a otra gente.
"Dead set" de la que tampoco tengo mucho que decir (porque estas cosas no son para analizarlas si no para disfrutarlas...jajaja) salvo, eso sí, recomendarla fervientemente a quien guste de la pelis de este tipo, es una serie para mí gusto, muy buena que no se pierde por los cerros de Ubeda y va directa al grano, es decir, a la acción de casquería que todos deseamos ver en una peli de zombies.

Y es que el argumento no puede ser más original: el apocalipsis zombie llega (por fin) a todo el planeta y alcanza de lleno -agarrense- ¡a los concursantes de Gran Hermano!
La panda del Gran Hermano inglés están tan ricamente disfrutando de su estancia en la casa cuando de repente se ven atacados por zombies de esos que corren, listos como ardillas, ágiles, hábiles, vamos de los zombies última generación que beben directamente de la fuente de "28 días después" y "28 semanas después" (de las que me considero fan desde que las vi).
A partir de ahí el plato, el plató y la diversión están servidos.
El mundo entero se convierte en zombie mientras que los últimos en enterarse son esta panda, pero cuando se enteran se atrincheran en su casita evitando como pueden ser devorados por sus congéneres.
Esto no tiene precio señores, de verdad, es de lo mejorcito que he podido disfrutar del género y dura sólo 5 capítulos. Una serie autoconclusiva con un final acorde a lo que se ve desde el principio.


Los personajes no tienen desperdicio en ningún sentido (¡que se lo digan a los zombies! que no dejan ni la muestra), desde la concursante tonta, pasando por el gilipollas al que todos odian, hasta la parejita formada dentro de la casa...
Terror, acción, suspense, y dosis de humor (el justo pero eficaz) sobre todo de la mano del personaje más repulsivo de la serie: el director del programa, un personaje soez y odioso que, sin embargo, es casi el que más jugo da, se combinan de una manera inteligente y entretenida.

Lo dicho, serie recomendadísima, eso sí, sólo para los amantes del género y la casquería (que haber, hayla y mucha), para ver con el estómago vacío pero con un buen boll de palomitas.

Lo mejor: todo.
Lo peor: lo corta que es y que no le hubieran dado un papel protagonista a Mercedes Milá.

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