El film comienza con una especie de reunión de las bandas más peligrosas y dicharacheras de la ciudad; Todos vestidos con fantásticos disfraces, desde bateadores asesinos, hasta payasos malvados.
Los Warriors, a pesar de ser tipos duros, acuden a la reunión de travestidos. En dicha reunión, Luther, el líder de los Rogues, dispara a Cyrus, la Reinona que había organizado toda la orgía.
Después de eso, los estúpidos Warriors son acusados de forma fraudulenta por Luther, interpretado magistralmente por Roger Hill, conocido en AteneoCríticas como El Virus, por su gran parecido físico al personaje malvado de: Érase una vez el hombre, Érase una vez la tierra, etc
Tras ésto, nuestro héroes se ven obligados a emprender la vuelta a casa sorteando todas las dificultades que las demás bandas judeomasónicas ponen en su camino.
Como los mensajes por la radio, quién se traga eso de los mensajes por la radio? Entre canción y canción la locutora suelta un par de avisos y unas cuantas amenazas a los Warriors, y la policía una vez más se encuentra ajena a todo esto.

Si lo que esperas es ver un film de banda callejeras, desde luego no es éste; El viaje de los Warriors de vuelta a casa se parecía bastante a la larga marcha del Señor Frodo y su fiel Sam Sagaz, dado que por momentos da la sensación de que nunca llegarán a casa; A todo esto, los Warriors no saben pegar, son unos virulas y de sabiduría callejera no tienen ni idea.