Haz click aquí para copiar la URL
Rusia Rusia · Stalingrado
Voto de Ferdydurke:
3
Drama Relato de los sucesos políticos acaecidos tras la muerte de la princesa Diana. Se centra sobre todo en las conversaciones que mantuvieron la Reina Isabel y el Primer Ministro Tony Blair para llegar a un acuerdo sobre la petición popular de que se celebrara un duelo nacional. (FILMAFFINITY)
1 de septiembre de 2022
1 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
La reina, una tipeja con un palo de escoba en el culo, la matrona, abrumador matriarcado, salimos ganando, eso que nos llevamos, de una banda/bandada/familia/mafia/matufia de actores de medio pelo capaces de tragar sapos y culebras, de aceptar papeles bochornosos y de recitar guiones ignominiosos con tal de seguir viviendo del cuento. El consorte, un bulto sospechoso al que nadie hace ni puto caso, parte del vetusto mobiliario. El príncipe de Gales, un cobarde pusilánime aberrante atorrante. El primer ministro, un patético pazguato panoli pagafantas trepa con la entidad de una brizna de hierba y la moral de una sanguijuela que, para más inri o desgracia, tiene como esposa a una comadreja, bruja horrorosa, arpía de aúpa, menuda jeta, con la que vive en un piso que sería la buhardilla pequeña de cualquier piso de cualquier camarero de cualquier película yanqui, cómo está la vivienda en la sagrada inglaterra. Todos rodeados de lacayos y lametraserillos alejados como de la peste de cualquier tipo de escrúpulo. Y la gente, dios mío el pueblo, qué hemos hecho para merecer esto, tanto sacrilegio, una borregada manipulada que da/causa una profunda vergüenza ajena, alelada, degradada.
Panorama para matar, como observar el comportamiento de cucarachas en celo o de riguroso luto severo.
Y todos juntos transforman a una frívola insufrible pedorra, la princesa del pueblo como Evita o Belén Esteban o Marilyn Monroe, ese es el nivel, en un mito nada menos, que el diablo nos coja confesados, así estamos, en la hez, para así tratar de olvidar desesperadamente aunque sea solo por un momento el rotundo clamoroso fracaso de unas vidas que no se sabe bien si son solo terriblemente estúpidas o también además definitivamente aburridas, tediosas, insoportables, pura nada.
Para lo único que puede servir esta cosa película es para hacerse (cruces) una cabal idea de cómo está el patio, del calado (caldo de cultivo), descomunal, del hundimiento, de la magnitud del desastre/debacle en el que estamos inmersos de lleno, de la imparable monstruosa decadencia de Occidente, directos al abismo, lugar o zona, ruina, donde la muerte es ya solo un espectáculo o pasacalles chabacano histérico grosero y la vida su pálido reflejo, una broma de mal gusto, una infame cafre tomadura de pelo.
Y la película es una loa indigna genuflexa sonrojante a estos comicastros de mala muerte que en verdad nada tienen que ver con el poder, cualquier parecido es imaginación o tontería, que tienen la capacidad de decisión o influencia real, rala, de un champiñón, ni lo huelen, ya que son solo títeres, ridículas mandados marionetas, cutres intérpretes, los que hacen creer a la masa abotargada pastoreada que ellos pintan algo jajaja, que son el auténtico contenido de la obra de teatro, los protagonistas, esa pueril de guardería fantasmada sinsorgada, cuánta inocencia, los que mandan de veras jamás aparecerían en estas grotescas carnavaladas que tanto afrentan, en semejante mamarrachada, en ellos/ellas se mean, están a otras cosas, bastante tienen con ponernos (además de en la mesa) la bota, quién me pone la pierna encima, en el cuello, aprieta un poco más para que yo la sienta.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow