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Voto de pilarpi77:
8
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6.2
5,230
Comedia. Drama. Romance
Guapa, inteligente y rica, la joven Emma Woodhouse es una reina sin rival en su pequeño pueblo. Nueva adaptación de la novela de Jane Austen publicada en 1815 sobre la vida de la joven Emma. El guion corre a cargo de la novelista ganadora del Premio Booker Eleanor Catton, que en el año 2013 se convirtió en la más joven en recibir el prestigioso galardón.
15 de julio de 2021
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Emma. Autum de Wilde . 2020.
En serio, falta no hacía ninguna. Otra adaptación, y van unas doscientas, de la novela de Jane Austen ejemplo canónico de autora clásica, elegante, divertida, inteligente, sutil y mala uva. Emma es quizás su mejor novela, aunque no la más famosa ni adorada por sus innumerables fans que pueblan el mundo mundial y son muy suyos, y suyas. A la mayor parte de sus seguidores no les molan las modernidades no quieren novedades ni les apetece ver cuerpos desnudos de caballeros estupendos muy aparentes de culo, ni jovenzuelas con rasgos exóticos subiéndose las faldas para calentarse la retaguardia a la luz de la chimenea y demostrando que no tiene presupuesto para ropa interior. Y aunque aprecian el humor fino de la autora prefieren que no se note mucho, no sea que no se tome en serio la historia y el carisma de sus personajes se diluya entre gracietas evidentes y más bien toscas.
Bueno, pues eso no pasa en esta Emma reinterpretada por una mente ágil, graciosa, irónica y moderna. Fresca y natural su visión presenta la modernidad del personaje creado por Austen , una rareza para su época que es al mismo tiempo heroína y antiheroína, despojada de toda aura de benevolencia autoral y sometida a su implacable pluma satírica.
En serio, falta no hacía ninguna. Otra adaptación, y van unas doscientas, de la novela de Jane Austen ejemplo canónico de autora clásica, elegante, divertida, inteligente, sutil y mala uva. Emma es quizás su mejor novela, aunque no la más famosa ni adorada por sus innumerables fans que pueblan el mundo mundial y son muy suyos, y suyas. A la mayor parte de sus seguidores no les molan las modernidades no quieren novedades ni les apetece ver cuerpos desnudos de caballeros estupendos muy aparentes de culo, ni jovenzuelas con rasgos exóticos subiéndose las faldas para calentarse la retaguardia a la luz de la chimenea y demostrando que no tiene presupuesto para ropa interior. Y aunque aprecian el humor fino de la autora prefieren que no se note mucho, no sea que no se tome en serio la historia y el carisma de sus personajes se diluya entre gracietas evidentes y más bien toscas.
Bueno, pues eso no pasa en esta Emma reinterpretada por una mente ágil, graciosa, irónica y moderna. Fresca y natural su visión presenta la modernidad del personaje creado por Austen , una rareza para su época que es al mismo tiempo heroína y antiheroína, despojada de toda aura de benevolencia autoral y sometida a su implacable pluma satírica.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Emma es una joven rica, ociosa, antipática, cruel, mimada y arrogante, una verdadera imbécil magníficamente interpretada por Anya Taylor Joy que se ocupa de este papelón sin que se le despeine ni un rizo. Nuestra nueva Emma original y de belleza poco ortodoxa, pasea sus modelitos por los parajes ingleses en los tiempos de la Regencia, bebe tazas de té en porcelana de Worcestershire, evita mirar a sus criados a la cara y enreda en las vidas ajenas, las de los pobres, con una desfachatez altiva y manipuladora. La pava se cree por encima del bien y del mal y ni siquiera es guapa. Personal y atractiva a lo mejor, pero guapa a lo rosa inglesa, ni de coña. Todos la adoran y la veneran, la reina del cotarro, la puta ama.
El único que le pone las peras a cuarto es el señor Knightley un caballero vecino, inteligente y buena persona que la riñe sin piedad y no le ríe ni una gracia. Este es el señor del desnudo artístico, de buen parecer, actor magnético sin exagerar, rubio rubísimo y más bien bajo de estatura, cosa que al parecer está muy mal y es repudiada por numerosos fans . La historia como supondrán es la de la adquisición de la madurez, el proceso de la conversión de una niñata arrogante y malcriada en una mujer cabal gracias a las contrariedades, al amor y a otras hierbas, a lo largo de un devenir ligero, liviano, aparentemente intrascendente pero que esconde una verdad profunda y humana singular : el descubrimiento de los demás como individuos, como sujetos, el olvido de la consideración de uno mismo como eje y centro del universo. Y la asombrosa conclusión de que los de “abajo”, también tienen su corazoncito y lo pueden gestionar como quieren .
Estética irreprochable hecha de planos hermosos con toques de modernismo hipster a lo Wes Anderson, ritmo alegre y cantarín, fotografía y diseño artístico de sobresaliente cum laude, bella banda sonora, interpretaciones divertidas y notables destacando la cargante, soberbia e infantil aunque llena de matices de la protagonista y la sensible y encantadora del antagonista, arropada por un coro donde no desentona ni el último de los monaguillos. Notable además en química para la pareja principal que emulsionan mejor que las bebidas en un Martini tanto en las discusiones como en los momentos amorosos logrando tanto divertirnos como emocionarnos, y un recuerdo especial para las niñas de rojo atravesando el pueblo en los momentos más especiales, un anticlímax estético y narrativo de primer orden y la secuencia del baile, rodada con exquisitez y emoción en que los protagonistas descubren atónitos entre roces de manos y miradas que se gustan, que se gustan lo que nosotros ya sospechábamos, una barbaridad.
El único que le pone las peras a cuarto es el señor Knightley un caballero vecino, inteligente y buena persona que la riñe sin piedad y no le ríe ni una gracia. Este es el señor del desnudo artístico, de buen parecer, actor magnético sin exagerar, rubio rubísimo y más bien bajo de estatura, cosa que al parecer está muy mal y es repudiada por numerosos fans . La historia como supondrán es la de la adquisición de la madurez, el proceso de la conversión de una niñata arrogante y malcriada en una mujer cabal gracias a las contrariedades, al amor y a otras hierbas, a lo largo de un devenir ligero, liviano, aparentemente intrascendente pero que esconde una verdad profunda y humana singular : el descubrimiento de los demás como individuos, como sujetos, el olvido de la consideración de uno mismo como eje y centro del universo. Y la asombrosa conclusión de que los de “abajo”, también tienen su corazoncito y lo pueden gestionar como quieren .
Estética irreprochable hecha de planos hermosos con toques de modernismo hipster a lo Wes Anderson, ritmo alegre y cantarín, fotografía y diseño artístico de sobresaliente cum laude, bella banda sonora, interpretaciones divertidas y notables destacando la cargante, soberbia e infantil aunque llena de matices de la protagonista y la sensible y encantadora del antagonista, arropada por un coro donde no desentona ni el último de los monaguillos. Notable además en química para la pareja principal que emulsionan mejor que las bebidas en un Martini tanto en las discusiones como en los momentos amorosos logrando tanto divertirnos como emocionarnos, y un recuerdo especial para las niñas de rojo atravesando el pueblo en los momentos más especiales, un anticlímax estético y narrativo de primer orden y la secuencia del baile, rodada con exquisitez y emoción en que los protagonistas descubren atónitos entre roces de manos y miradas que se gustan, que se gustan lo que nosotros ya sospechábamos, una barbaridad.