Una típica película americana, una película fácil pero una historia con muchos valores, cierto es.
Me ha gustado, me ha emocionado, me ha hecho llorar y sobre todo, pasar un buen rato pero es una película muy fácil, muy americana, sabe como sacar la lágrima fácil del espectador, esos monólogos fáciles, esas frases hechas pero una película con valores, una historia interesante y muy bien llevada.

Manhattan, clase alta de New York, niños en escuelas caras, casa bonitas en Mahattan y en el centro y a las afueras, ambientaciones muy buenas, escenas familiares típicas, todo es muy típico de la clásica película americana rodada en Manhattan.

Narra principalmente la historia de una mujer que se enamorada de un hombre divorciado y con dos hijos, se trata sobre todo la difícil situación de adaptación de los hijos a la nueva situación en casa.
Una historia común pero muy bien tratada, con esos toque facilones pero que no llegan a molestar, al contrario, se agradece alguna lágrima fácil.

El reparto es muy bueno, incluso hasta el niño, el único problema, que es un desperdicio de actuaciones para una película tan fácil, la dirección es correcta para llenar salas de cine pero no para más, es el único problema que tiene.

La historia del cáncer está muy bien tratada, me gusta y lo mejor que no está llevada hasta el extremo del sufrimiento, podría haberlo hecho pero gracias a dios sabe terminar la película.