Siempre he oído que si quieres que no te encuentren una cosa por la razón que sea, lo que tienes que hacer es dejarlo a la vista, que lo vea todo el mundo, ya que si se disfraza algo de ordinario se reducen las posibilidades de ser descubierto. Pues tras ver esta inteligente película me he dado cuenta de que ese truco es la base de cualquier mago y... de esta película. Me ha parecido fascinante, tiene un guión de levantarse y aplaudir, los actores cumplen con nota sus papeles, que pecaban de ser lineales y la recreación de la época no está nada mal.
Toda la película se sustenta en el hecho de que todo lo que vemos tiene dos interpretaciones: lo que es real y lo que nuestros ojos ven. Por eso, tras observar cosas que sí encajan, al desvelarse el secreto del film, contemplas cómo encajan mejor.
Un peliculón muy entretenido con mucho ritmo con giros narrativos sorprendentes y coherentes, y un final que te dejará sin palabras. Yo no quiero que esto se acabe, quiero más películas como ésta, por favor, que el telón se mantenga alto.