Aborrecible y enésima entrega de la saga parapetada por Santiago Segura con la intención de abordar temas de actualidad (en ese caso la madrileña sobreexplotación de los llanos terrenos que esperaban edificar Eurovegas y que acabó en lastre) y en que nuestro sufrido protagonista, tras salir de la cárcel se embarca en los planes que ha preparado Marshall (Alec Baldwin), exjefe de seguridad del Casino Eurovegas paras hacerse con el importante botín de la caja fuerte. Para ello Torrente recurrirá a sus mejores amigos que no necesitan presentación ni en la ficción ni en la realidad: desde Jesulín de Ubrique, Fernando Esteso, Chiquito de la Calzada, Cañita Brava la presentadora Anna Simon, el showman Florentino Fernandez y actores como Carlos Areces y la recuperación de otros como Chus Lampreave y Neus Asensi a qu8enes ya habíamos visto en la primera entrega.

Ésta quinta aportación del personaje de Torrente nos lleva a un futuro no muy lejano, en 2018 el estadio Vicente Calderón forma parte de las ruinas de la historia, la tumba del Fary cual la de Jim Morrison, es constantemente profanada y Cataluña se ha independizado por fin del resto de España. Pero Torrente está dispuesto a seguir adelante y entrar a formar parte del plan perfecto del robo que ha trazado Marshall, por muy absurdos que sean sus métodos. De hecho las situaciones cómicas están hechas para la película, porque sino el palo insistente de Segura y su Torrente ya no lo aguanta nadie.