Tocaba animar a la tropa y la tendencia de 1941 era rodar películas que tocaran, directa o indirectamente, la Segunda Guerra Mundial. Hathaway lo hizo en pleno conflicto y posteriormente pero su espíritu aventurero situó sus tramas lejos del corazón de Europa. Así "Wing and a Prayer" (1944) transcurría en el Pacífico y "The desert Fox: the story of Rommel" (1951) en la África desértica.

"Cuando muere el día" concentra variadas nacionalidades europeas en África oriental, que conviven con tribus pacíficas y alguna guerrillera. Es una historia inocentona de buenos soldados, traiciones, rivalidades, elementos autóctonos y, por supuesto, la presencia de Gene Tierney.