64/09(07(02/09) Interesante film, que roza el documental. Con un muy buen guión de Peter Morgan, creador de relatos con tintes políticos como "Queen", "El último Rey de Escocia" y "Las hermanas Bolena", este "Frost ...", está relatado como si de un combate se tratara con un púgil venido a menos, de mala reputación, un Richard Nixon (Frank Langella) que creía que tras la entrevista-combate, que él pensaba ganar, convenciendo a los americanos de que él no tuvo culpa en lo ocurrido, volvería a resurgir, tornaría de su retiro en California a Washington, donde se le tomaría en cuenta en las grandes decisiones y quedaría restaurada la dignidad de su presidencia, y en frente tenía él que le creía sería un flojo rival, David Frost (Michael Sheen), un británico, frívolo presentador de shows televisivos, pensaba que entrevistar al expresidente sería un bombazo, por ello lo contrató por 600.000 $, pensó que conseguiría hundirlo y que pidiera perdón por todo el mal que había realizado, se buscó a buenos entrenadores, gente que conocía los secretos más oscuros de Nixon, al final en del duelo, mediante la mejor escena de la cinta (Spoiler) los dos descubren que son más parecidos de lo que creían. El director Ron Howard demuestra una vez más que hay proyectos que le vienen grandes, rueda elegantemente, domina los elementos externos de gran forma sean fotografía, música, montaje, dirección artística, pero en lo importante que es el desarrollo de la historia funciona a medias, le falta alma, por momentos parece un telefilm rutinario, es ameno, entretiene, pero no alcanza lo que podía haber sido. De lo que más me gusta del film es su intrahistoria un hombre y su sueño, o sea David Frost soñando en la grandeza de la entrevista y a la vez las cadenas negándose a comprarla, es muy didáctico de cómo se mueven estos asuntos. Langella borda el papel del paranoico Nixon, con su mirada melancólica y su lenguaje corporal mustio, magnífico. Recomendable a los que gusten de historias periodísticas de calado. Fuerza y honor!!!