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Voto de TOM REGAN:
7
6.8
861
Fantástico. Drama
Adaptación de la novela de Charles Dickens. El avaro Ebenezer Scrooge siente animadversión por la Navidad y por todo lo relacionado con estas fiestas. Un día recibe en su casa la inesperada visita de un fantasma. Se trata de su amigo Jacob Marley que le anuncia cuál será su futuro y, además le advierte de la visita de tres fantasmas más: el del Pasado le hará recordar con añoranza su infancia y juventud, el del Presente le mostrará cómo ... [+]
27 de diciembre de 2020
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
420/29(24/12/20) Notable adaptación del clásico de Charles Dickens la que es para muchos la mejor adaptación del clásico relato dickensiano (1843) es esta producción británica producida y dirigida por el irlandés Brian Desmond Hurst (amigo personal de John Ford al que asesoró durante el rodaje en Irlanda de “El hombre tranquilo” de 1952), con guión de Noel Langley (“El Mago de Oz” o “Ivanhoe”), que haces unos incisivos añadidos a la historia, siendo protagonizada por el escocés Alastair Sim como el mítico Ebenezer Scrooge, hombre avaro y egoísta que experimenta una profunda transformación tras la visita de tres fantasmas (pasado, presente y futuro) en Nochebuena. Teniendo una fabulosa ambientación victoriana, bañada en el goticismo, con unos personajes muy bien delineados en pocos, trazos tampoco se puede exigir mucho con su escueto metraje inferior a la hora y media, donde son buenos para su contexto temporal los efectos visuales remanentes a los espíritus, donde la transformación mental del protagonista nos llega gradualmente, en lo que es un canto a la alegría de vivir y disfrutar de la vida, donde te sientes emocionado por el modo veraz en que sentimos la odisea en la que nos embarcamos. Con unas alteraciones e inserciones originales del guionista que enriquecen y dan más fondo al origen del comportamiento misántropo de Scrooge, manteniendo la esencia del relato, da más hondura dramática al protagonista. A parte de la Natividad bíblica este e relato de Charles Dickens es el más famoso sobre la Navidad, llevada al cine y televisión en decenas de ocasiones desde el nacimiento del cine.
Relato filmado con gran sentido lóbrego, ello gracias a la estupenda cinematografía de C.M. Pennington-Richards (“The hidden room” o “1984”), con mucho de expresionismo alemán en el modo de crear un halo tétrico en muchos momentos, como en esa aparición del fantasma de Jacob Marley primero con el sonido tirando de las cadenas por el suelo, luego con solo su mano cual ente autónomo, estamos en los prolegómenos de esta noche de epifanías, y aún piensa Ebenezer que esta visión puede ser fruto de que le ha sentado mal la comida (¿?).
Destaca entre las alteraciones del relato dickensiano una especie de ‘Diablo’ al que Ebenezer cual Fausto vende ‘su alma’, ello en la figura del creado para la ocasión Sr. Yorkin (no está en el libro), que nos viene a decir que todos tenemos cicerones) para lo bueno y malo), el apegarse a este crápula es lo que hace que cual Anakin se pase Scrooge al lado oscuro, convirtiéndose en este ‘Darth Vader’ particular de las Navidades, dando a entender que hay algo bueno en el interior del protagonista que su relación con Yorkin (gran Jack Warner) ocultó, ese corazón bueno que se enamoró de Alice (buena Rona Anderson). También apreciable que se le de unos bordes ásperos a Scrooge apegados a algo tan navideño como es el nacimiento y su contraposición en la muerte, me refiero a que se añade de cosecha propia para el film que su (querida) hermana Fan (Carol Marsh) murió al dar a luz al sobrino de Ebenezer, Fred (correcto Brian Worth), y por ello este siente rechazo por él. Además el padre de Ebenezer nunca demostró amor por su vástago al considerarlo también culpable de la muerte al nacer de su madre, creando así círculo vicioso de rencores soterrados que otorgan forma al carácter rudo anti-navideño del protagonista, pues además todo esto ocurre en Navidad. Todas estas inserciones son contadas en el más extenso de los tramos, como es el del fantasma de las Navidades Pasadas, ello para dar sentido a la transformación mental.
Alastair Sim cuyo Ebenezer Scrooge está sensacional, tanto que los muchos Scrooge posteriores han bebido claramente de su imagen e interpretación, no exponiéndolo como un malo malísimo, si no dándole argumentos en cada acción (por cierto, muchas de sus posiciones son compartidas por mi), vemos que su misantropía tiene un origen, su avaricia es un medio de protegerse ante los demás para no encariñarse con nada que le pueda dañar, vemos su metamorfosis de modo gradual y veraz, pasando por varias estadías, desde la rabia, la ira, o la aceptación, a lo que ayudan sus saltones y muy expresivos ojos, demostrando toda una gama de emociones desbordadas en su rush final entusiasta, hasta su trémulo final, que no por previsible se hace menos conmovedor; Ayudan a elevar el nivel unos notable secundarios, desde el apocado Bob Cratchit encarnado por buen Mervyn Johns; un crudo Jacob Marley embestido por Michael Horden, en su dual carácter de avaricioso cuasi-siamés de Ebenezaer y en su figura fantasmal transparente; Kathleen Harrison como la asistenta Mrs. Dilber, teniendo su momento de gloria en la mañana de Navidad, y su sorpresa ante la transformación de su jefe; George Cole como el joven Scrooge da vigor y siembra con sus vicisitudes y el modo de afrontarlas de la acritud del presente; Tiny Tim al que da vida Glyn Dearman con gran ternura; Hasta el Enterrador encarnado por Ernest Thesiger aprovecha su escaso tiempo en pantalla para regalarnos mordaz humor negro; Como curiosidad destacar que aparece Patrick Macnee (más tarde famoso por la serie “Los Vengadores”) en un flashback como joven Jacob Marley.
Se le puede achacar que en su asimetría en los bloques de los tres fantasmas hace que pierda fuerza el Presente y Futuro, así como su rush final quede muy metido a prisas, nos llega claro todo, pero discurre a empujones.
Relato filmado con gran sentido lóbrego, ello gracias a la estupenda cinematografía de C.M. Pennington-Richards (“The hidden room” o “1984”), con mucho de expresionismo alemán en el modo de crear un halo tétrico en muchos momentos, como en esa aparición del fantasma de Jacob Marley primero con el sonido tirando de las cadenas por el suelo, luego con solo su mano cual ente autónomo, estamos en los prolegómenos de esta noche de epifanías, y aún piensa Ebenezer que esta visión puede ser fruto de que le ha sentado mal la comida (¿?).
Destaca entre las alteraciones del relato dickensiano una especie de ‘Diablo’ al que Ebenezer cual Fausto vende ‘su alma’, ello en la figura del creado para la ocasión Sr. Yorkin (no está en el libro), que nos viene a decir que todos tenemos cicerones) para lo bueno y malo), el apegarse a este crápula es lo que hace que cual Anakin se pase Scrooge al lado oscuro, convirtiéndose en este ‘Darth Vader’ particular de las Navidades, dando a entender que hay algo bueno en el interior del protagonista que su relación con Yorkin (gran Jack Warner) ocultó, ese corazón bueno que se enamoró de Alice (buena Rona Anderson). También apreciable que se le de unos bordes ásperos a Scrooge apegados a algo tan navideño como es el nacimiento y su contraposición en la muerte, me refiero a que se añade de cosecha propia para el film que su (querida) hermana Fan (Carol Marsh) murió al dar a luz al sobrino de Ebenezer, Fred (correcto Brian Worth), y por ello este siente rechazo por él. Además el padre de Ebenezer nunca demostró amor por su vástago al considerarlo también culpable de la muerte al nacer de su madre, creando así círculo vicioso de rencores soterrados que otorgan forma al carácter rudo anti-navideño del protagonista, pues además todo esto ocurre en Navidad. Todas estas inserciones son contadas en el más extenso de los tramos, como es el del fantasma de las Navidades Pasadas, ello para dar sentido a la transformación mental.
Alastair Sim cuyo Ebenezer Scrooge está sensacional, tanto que los muchos Scrooge posteriores han bebido claramente de su imagen e interpretación, no exponiéndolo como un malo malísimo, si no dándole argumentos en cada acción (por cierto, muchas de sus posiciones son compartidas por mi), vemos que su misantropía tiene un origen, su avaricia es un medio de protegerse ante los demás para no encariñarse con nada que le pueda dañar, vemos su metamorfosis de modo gradual y veraz, pasando por varias estadías, desde la rabia, la ira, o la aceptación, a lo que ayudan sus saltones y muy expresivos ojos, demostrando toda una gama de emociones desbordadas en su rush final entusiasta, hasta su trémulo final, que no por previsible se hace menos conmovedor; Ayudan a elevar el nivel unos notable secundarios, desde el apocado Bob Cratchit encarnado por buen Mervyn Johns; un crudo Jacob Marley embestido por Michael Horden, en su dual carácter de avaricioso cuasi-siamés de Ebenezaer y en su figura fantasmal transparente; Kathleen Harrison como la asistenta Mrs. Dilber, teniendo su momento de gloria en la mañana de Navidad, y su sorpresa ante la transformación de su jefe; George Cole como el joven Scrooge da vigor y siembra con sus vicisitudes y el modo de afrontarlas de la acritud del presente; Tiny Tim al que da vida Glyn Dearman con gran ternura; Hasta el Enterrador encarnado por Ernest Thesiger aprovecha su escaso tiempo en pantalla para regalarnos mordaz humor negro; Como curiosidad destacar que aparece Patrick Macnee (más tarde famoso por la serie “Los Vengadores”) en un flashback como joven Jacob Marley.
Se le puede achacar que en su asimetría en los bloques de los tres fantasmas hace que pierda fuerza el Presente y Futuro, así como su rush final quede muy metido a prisas, nos llega claro todo, pero discurre a empujones.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Richard Addinsell escribió varias piezas para el subrayado de la película, que van desde la oscuridad y el mal humor hasta la luz y la alegría. Una de las melodías más notables es una polca, utilizada en las dos versiones diferentes de la cena de Fred, la que Scrooge observa mientras está con el Fantasma del regalo de Navidad, y la otra con Scrooge asistiendo a la fiesta después de expiar su pasada frialdad hacia Fred y su esposa. La película contiene extractos de algunos villancicos tradicionales y otras melodías. "Escuchen! El heraldo cantan los ángeles" se canta en parte de los créditos iniciales y por los mineros cuando Scrooge está con el Fantasma del regalo de Navidad. Se reproduce una versión instrumental de "Vi tres barcos" cuando Scrooge le da una moneda a la Sra. Dilber, y nuevamente justo antes del final de la película. "Silent Night" se toca y se canta en varios momentos, incluida la última parte de la escena final y "The End". La danza del país inglés "Sir Roger de Coverley" se toca y se baila durante la escena en la que Scrooge visita la oficina de Old Fezziwig con El fantasma de la Navidad pasada. La trágica canción folclórica "Barbara Allen" se toca como instrumental cuando el joven Scrooge está hablando con su hermana Fan, y se canta a dúo en la fiesta de Navidad de Fred. Scrooge aparece en medio de la línea "Joven, creo que te estás muriendo", lo que hace que los cantantes se detengan antes de las dos últimas palabras.
En la película, la señora Dilber es el nombre de la asistenta, mientras que en el libro la mujer no tenía nombre y la lavandera se llamaba señora Dilber. El papel de la asistenta se amplía enormemente en la película, hasta el punto de que recibe una segunda facturación en la lista de personajes; La película amplía la historia al detallar el ascenso de Scrooge como prominente hombre de negocios. Fue corrompido por un codicioso nuevo mentor, el Sr. Jorkin (Jack Warner) que lo alejó del benevolente Sr. Fezziwig y también le presentó a Jacob Marley. Cuando se descubre que Jorkin, que no aparece en absoluto en la historia original de Dickens, es un malversador, los oportunistas Scrooge y Marley ofrecen compensar las pérdidas de la empresa con la condición de que reciban el control de la empresa para la que trabajan, y así, nace Scrooge y Marley; Durante la secuencia de Ghost of Christmas Present, la ex prometida de Scrooge, Alice, trabaja con personas sin hogar y enfermas. El personaje se llama "Belle" en el libro y se convierte en una madre felizmente casada de varios hijos; La película también postula que la hermana de Ebenezer murió mientras daba a luz a su sobrino Fred, lo que generó el alejamiento de Scrooge de él. También se nos dice que la madre de Ebenezer murió mientras le daba a luz, lo que provocó que su padre se sintiera resentido con él al igual que Ebenezer se resentía con su sobrino. En el libro, Fan es mucho más joven que Ebenezer y no se menciona la causa de su muerte.
Me queda una película apreciable y disfrutable, donde su mensaje se proyecta de modo diáfano. Fuerza y honor!!!
En la película, la señora Dilber es el nombre de la asistenta, mientras que en el libro la mujer no tenía nombre y la lavandera se llamaba señora Dilber. El papel de la asistenta se amplía enormemente en la película, hasta el punto de que recibe una segunda facturación en la lista de personajes; La película amplía la historia al detallar el ascenso de Scrooge como prominente hombre de negocios. Fue corrompido por un codicioso nuevo mentor, el Sr. Jorkin (Jack Warner) que lo alejó del benevolente Sr. Fezziwig y también le presentó a Jacob Marley. Cuando se descubre que Jorkin, que no aparece en absoluto en la historia original de Dickens, es un malversador, los oportunistas Scrooge y Marley ofrecen compensar las pérdidas de la empresa con la condición de que reciban el control de la empresa para la que trabajan, y así, nace Scrooge y Marley; Durante la secuencia de Ghost of Christmas Present, la ex prometida de Scrooge, Alice, trabaja con personas sin hogar y enfermas. El personaje se llama "Belle" en el libro y se convierte en una madre felizmente casada de varios hijos; La película también postula que la hermana de Ebenezer murió mientras daba a luz a su sobrino Fred, lo que generó el alejamiento de Scrooge de él. También se nos dice que la madre de Ebenezer murió mientras le daba a luz, lo que provocó que su padre se sintiera resentido con él al igual que Ebenezer se resentía con su sobrino. En el libro, Fan es mucho más joven que Ebenezer y no se menciona la causa de su muerte.
Me queda una película apreciable y disfrutable, donde su mensaje se proyecta de modo diáfano. Fuerza y honor!!!