No es raro que el remake sea peor que la original pero hacer un remake peor que la fallida "Point Blank" de Boorman, es todo un récord.

Pero qué se puede esperar de cualquier película en la que está involucrado Mel? En esta nueva entrega, volvemos a encontrarnos con toda su sucesión de tics en una sobreactuación soberbia, fiel a su estilo. Si además tenemos en mente a Lee Marvin, la comparación es odiosa. Si añadimos que Mel ha quitado lo único bueno de la original, es decir, la violencia de Lee, nos queda el churro de Payback.

La dirige un desconocido sin talento elegido por Mel con seguridad. Imaginense que la productora propusiera un buen director por equivocación. Le tendría que dar clases de interpretación a Mel con lo mayor que es y al final tendría que dejarlo por imposible.

Mel, por qué no te metes a sacerdote de una vez y nos dejas de aburrir?