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Costa Rica Costa Rica · Me encantan las galletas
Voto de Javier Moreno:
4
Drama Adaptación de un libro de John Carlin (Playing the enemy). En 1990, tras ser puesto en libertad, Nelson Mandela (Morgan Freeman) llega a la Presidencia de su país y decreta la abolición del "Apartheid". Su objetivo era llevar a cabo una política de reconciliación entre la mayoría negra y la minoría blanca. En 1995, la celebración en Sudáfrica de la Copa Mundial de Rugby fue el instrumento utilizado por el líder negro para construir la unidad nacional. (FILMAFFINITY) [+]
19 de enero de 2011
2 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Y otra más para papá Clint !

Alguien (a ser posible macho alpha con aspecto rudo y disconforme) debería llamar a la puerta de Clint Eastwood para decirle: -en nombre de la humanidad, ya hemos pillado el mensaje, ¿le importaría empezar a realizar nuevos guiones? el mismo de siempre empieza a rozar nuestros cigüeñales de manera molesta. Venga, que aún creemos que puede hacerlo.-


Esto es debido a la inyección de moral con la que pretende aleccionar (sin mucho éxito, creo) en tooooooooooodas sus películas. "En el mundo hay pecado y errores humanos, pero existe algo dentro de nosotros que nos ayudará a encontrar el camino y solucionarlo". Durante algunos minutos las arcadas eran constantes. Con las famosas cartas del más allá de Iwo Jima tuve la tentación de ir al aseo a arrojar violentamente por la boca lo contenido en mi estómago gracias al guión cojitranco de los buenos y los malos.

Debo estar gobernado por valquirias para preferir la bilis que me genera en la garganta directores como Haneke o Von Trier al medicamento que me hace tragar una y otra vez el pesado de Clint. Y que encima se atreva por personajes reales, bueno, es sólo una desfachatez de la soberbia estadounidense.


Todo es creíble, y Damon está muy bien (y muy cambiado), pero si Homer no me llena un chicle con Focusín, yo no me lo tomo.

¡Qué bonito sería el mundo si le hiciésemos caso!
¡Gracias señor director!
Fueron algunas de las exclamaciones al terminar el examen médico, digo la película.

El mensaje anodino y repetitivo es: "Todo se supera con la fórmula mágica de ¡Hollywood!, ahora en pastillas de 250mg. El efecto comienza a las dos horas.

*** Este anuncio es de un medicamento, para cualquier duda consulte con la Ética a Nicómaco, lea a Spinoza o retroceda en la filmografía de Clint Eastwood.
Javier Moreno
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