Creía que Giorgio Stegani no sería más que uno más de esos directores currantes que hacían tres o cuatro spaghetti western al año, pero revisando su filmografía encontré además "El molino de las mujeres de piedra", una dignísima película de terror que me hace pensar que no, no era un director del montón. Dicho esto el personaje de Lee Van Cleef sí es uno como tantos y tantos antes visto mil veces. Pero funciona. Funciona de forma rotunda, no sé qué tenía este hombre que con su presencia ocupaba toda la pantalla. A ello se le suma una historia original, mucha acción, un malo (más allá de Van Cleef, un malo sin ambigüedades) muy atractivo y la brevedad que exigía el género (con la apabullante excepción de Sergio Leone): el resultado es más que digno.

Creo que no pasa nada por decir que lo normal, lo habitual, es que un spaghetti western sea sólo aceptable por los seguidores del género y que la mediocridad abunda. No pasa nada por decir que lo normal es que sean películas del montón tirando a malas. Por eso es tan satisfactorio encontrar cositas como "Más allá de la ley", un título de esos típicos con un Van Cleef, ya lo he dicho, que se encuentra en su salsa. Parece malo pero no lo es, o al menos no tanto como se esperaba, porque hay un malo peor. Hay personajes secundarios estúpidos, incluido un Bud Spencer que ni él mismo sabía en lo que se iba a convertir en los setenta poco después.

No es una obra maestra ni falta que hace, es cine de batalla, con un final apresurado que no gustará todos, pero al fin y al cabo una película entretenida y muy digna de un director que definitivamente no era del montón.