"Historias de Filadelfia" cuenta con ese encanto de las producciones del Hollywood más clásico, aunque tras visualizarla no puedo evitar sentirme un poco decepcionado. No se trata de una película que esté mal, pero el sabor de boca general que me ha quedado es el de que está algo sobrevalorada, en gran medida gracias a la época a la que pertenece y a los interpretes que la protagonizan.

Lo más destacado de la obra que nos ocupa son las actuaciones de Cary Grant, Katharine Hepburn y James Stewart, sobresaliendo en especial Katharine Hepburn, y sus escena con James Stewart, que gozan de una mayor complicidad.

Sin embargo, el argumento no termina de engancharme del todo en ningún momento, y, en mi opinión, al final lo que nos encontramos es una experiencia que por una parte no funciona especialmente bien como película romántica (ni como drama), y por otra parte, tampoco es especialmente divertida como comedia (que en principio es el genero al que pertenece). Además, no se llega a profundizar en la gran mayoría de personajes, y la conclusión de la historia no tiene ningún sentido en base a lo que se nos ha mostrado hasta ese último momento.

En resumen, tal vez la película no haya envejecido especialmente bien como comedia romántica, o tal vez yo no haya conseguido apreciar sus virtudes. Se trata de una película agradable, con el encanto de lo clásico (la época y los interpretes), pero al mismo tiempo cuenta con bastantes puntos negativos ya mencionados, y no resulta especialmente entretenida, dejándome un sabor de boca agridulce.