Película sobre una venganza largamente macerada, que ha recibido grandes elogios y 4 Goyas, pero que a mi me ha parecido bien, pero no fantástica.
Para mi gusto, para tratar de hacerla más intensa rueda muchos planos cámara al hombro en una perspectiva subjetiva de primer plano o justo desde detrás del protagonista, pero tal vez abusa y por momentos, al menos a mi, llega casi a ser mareante.
Y por otro lado, será que soy un amante de las bandas sonoras, pero la prácticamente ausencia total de banda sonora no me convence, aunque claramente es una decisión para hacerla más opresiva y primera persona.
Estos dos detalles nos muestran claramente que el director y también guionista de la historia (por lo que se llevó Goya a dirección novel y guión) , nos cuenta nos cuenta en primera persona, tal como la ha concebido, sin aditamentos, una historia en primera persona. No hace una actividad coral de dirección, de aunar historia, historias paralelas, secundarios, música, cambios de planos...